Poco se sabe de la princesa Leonor y la infanta Sofía más allá de la estricta rutina que les ha impuesto siempre su madre.
Pero, además de esta faceta, las hijas de los reyes disfrutan de numerosas aficiones que muy pocos conocen, y a los que quizás no todos podemos tener acceso.
Las pasiones que la reina Letizia ha transmitido a sus hijas
Para empezar, tanto Leonor como Sofía han heredado la pasión de su madre por el ballet. La reina Letizia incluso se dedicó a ello en su juventud, y ha conseguido transmitirle el amor por el baile a sus niñas.
Justo por eso, la familia aprovecha para ir a ver algún espectáculo en cuanto tienen oportunidad, y en multitud de ocasiones se les ha visto disfrutar de este tipo de eventos.
Más allá del ballet, Letizia también ha sabido transmitirle a su primogénita el amor por el periodismo, y es que la joven ha demostrado en numerosas ocasiones sus buenas dotes comunicativas.
De hecho, al asistir a su primer acto en solitario, Leonor hizo buena gala de sus genes de periodista, tomando la palabra y realizando varias preguntas.
A la infanta Sofía le encanta la tecnología
En cuanto a la infanta Sofía, ella ha resultado ser una verdadera amante de la tecnología. De hecho, ha asistido a numerosas ferias tecnológicas para estar al tanto de las últimas novedades en el mundillo.
Además, parece que Leonor también es muy buena en informática, habiéndose formado con las últimas herramientas en el sector.
Pero, pesar de que ambas están al día con los últimos avances, tienen terminantemente prohibido el uso de las redes sociales.
Al contrario que otros jóvenes de su edad, las hijas de los reyes no pueden permitirse el lujo de pasar tiempo en Facebook, Instagram o Twitter.
Lugares en la red donde pueden compartir fotos, vídeos o comunicarse con sus amigos. Aunque, en su caso, puede suponer un gran peligro.
Muy precavidos y cuidadosos con la intimidad de Leonor y Sofía, los reyes han incidido mucho en este aspecto. Justo por eso, les habrían limitado el uso de ordenadores o teléfonos móviles a apenas unas cuantas horas al día.
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Afición por el cine y la lectura
De lejos es sabido que tanto el rey Felipe como la reina Letizia son grandes amantes del cine. Algo que han sabido transmitir a sus hijas, que se interesarían por películas y directores extranjeros como Akira Kurosawa. Aunque también les encanta la animación o el teatro.
A eso se suma también la importancia que Leonor y Sofía le han dado siempre a la lectura. A la reina Letizia siempre le ha gustado leer, acudiendo siempre a todas las ferias.
Un amor que ha sabido inculcar a sus hijas, descubriéndoles autores como Dickens, Tolkien, James M. Barrie, Robert Louis Stevenson o Lewis Carroll.
Eso sumado a una estricta formación en idiomas, dominando perfectamente el inglés, árabe o incluso el chino mandarín.
Algo de lo que ha hecho buena gala Leonor en varios de sus discursos pronunciados en público y con los que ha conseguido encandilar a todos los presentes.
Leonor y Sofía, grandes aprendices de repostería
A las hijas de los reyes también les gusta mucho la cocina, quizás uno de sus pasiones más desconocidas. Pero, sobre todo, sentirían predilección por la repostería.
El rey Felipe aprendió a cocinar siendo muy joven, durante su estancia en Estados Unidos, y ha sabido transmitirles esa pasión a Leonor y Sofía.
Por eso, las niñas están aprendiendo a cocinar. Aunque también es cierto que la estricta alimentación que les tiene impuesta su madre, las obliga a cuidar lo que comen desde muy pequeñas.
La afición de la familia por el deporte
De lo que no cabe duda, es que la familia real disfruta realizando actividades al aire libre y practicando deporte.
Además de montar a caballo y practicar ballet, la princesa Leonor también disfruta con otros deportes como el voleibol.
Y, siempre que tienen tiempo, también realizan escapadas en familia para practicar esquí.