La boda de Chenoa y su novio, Miguel Sánchez, ha sido uno de los eventos del año. Sin embargo, la artista no pudo invitar a todas aquellas personas que le habría gustado.
La pareja optaba por una celebración más íntima y pequeña, lo que también llevaba a reducir la lista de invitados.
"Tienes que tomar decisiones que te parten el corazón, pero yo necesito que los míos estén bien. Mi abuela tiene 98 años y no puedo permitirlo", reconocía la extriunfita.
"Antes de la pandemia, quería hacer algo grande. Ahora sé que será algo más íntimo, más pequeño, por circunstancias lógicas. Los dos tenemos familiares muy mayores y queremos protegerlos".
Así, se veía obligada a dejar de lado a algunos de sus grandes amigos de Operación Triunfo, entre los que se encuentran Rosa López o Manu Tenorio, entre muchos otros.
De hecho, los únicos que tuvieron la suerte de asistir al enlace fueron Natalia Rodríguez, Gisela, Geno y Alejandro Parreño.
Mientras que, por otro lado, parece que el resto de sus compañeros tendrán que conformarse con una quedada en la que la novia tiene planeado reunir a todos aquellos que no asistieron al enlace.
"Se celebrará igual, compraré otra tarta de boda y no pasa nada, lo pasaremos genial", prometía Chenoa.
Rosa López ha sido una de las que más dolidas se han mostrado con la actitud de su íntima amiga. Así, decidía hablar abiertamente sobre sus sentimientos tras no haber recibido invitación.
Muy emocionada con el lanzamiento de su nuevo single, la ganadora de 'OT' está atravesando una gran etapa personal.
"A mí me mueve la belleza de las personas. Ha salido mi single 'Esa belleza'. Estoy emocionada. Como artista independiente cuesta la vida mantenerse. Es muy duro, lo único bueno es encontrar esa belleza en las personas, en las situaciones, saber recapitular", confesaba Rosa.
Rosa López, gran ausente en el enlace de Chenoa
Además, la cantante no perdía tiempo a la hora de halagar a Chenoa tras verla vestida de novia. "Estaba preciosa, la quiero muchísimo y que yo con verla feliz, esté cerca o lejos, ya está. Somos amigas", comentaba al respecto.
"Se me pone un nudo en la garganta porque veo que me preguntáis mucho pero le tenéis que preguntar a ella...", decía sobre el motivo de su ausencia en la boda.
"Pues me hubiera gustado ir, claro", aseguraba. Sin embargo, Rosa deja claro que ambas siguen manteniendo una gran relación.
"Laura es para comérsela", apuntaba. "Cada uno tiene que hacer del día de su boda el mejor de su vida, como quiera y eso es respetable. Pero es verdad que me ha dado envidia de los compañeros que han ido", dejaba caer algo dolida.
Aunque también lanzaba una pullita al insinuar que si ella se casase, sí que invitaría a Chenoa. De momento, la novia ya está planeando reunir a todos aquellos amigos que no pudieron ir a su boda.
Nuevo garrotazo para David Bustamante de parte de su mejor amigo
Por su parte, Rosa también podría planear pasar por el altar dentro de un tiempo, ya que ahora mismo está muy feliz junto a su pareja, Iñaki.
Ella misma le define como "un ángel que llegó a su vida". Sin embargo, parece que la granadina ya no tiene tanta ilusión por casarse. "Hace 20 años tenía ganas de casarme, ahora ya hay cosas súper brutales en nuestra vida", reconocía.
Al igual que el tema de los hijos, un asunto pendiente en su vida ante el que siente que ya va tarde. "Hay veces que dan ganas y otras que no", afirma sobre la posibilidad de convertirse en madre.