Begoña Gomez, primer plano

El bulo que corre sobre Begoña Gómez y que saca de sus casillas a Pedro Sánchez

Begoña Gómez, la mujer de Pedro Sánchez, fue víctima de un comentario falso que se viralizó en internet

Begoña Gómez ha tenido que lidiar en muchas ocasiones con comentarios desafortunados hacia ella. El simple hecho de ser la esposa de Pedro Sánchez parecía que era suficiente para cargar contra su persona. Se ha puesto en duda su valía profesional, además de recibir críticas por beneficiarse del cargo de su marido.

Todavía tienen muy fresco un comentario que hizo un usuario en Twitter que se acabó viralizando. En un intento por desprestigiarla publicó una información falsa que llegó a miles de personas. Aunque con el tiempo se descubriría que se trataba de una mentira.

"Begoña Gómez ha sido excluida de su actividad docente en la Universidad Complutense de Madrid por el claustro de doctores y catedráticos". Así comenzaba el mensaje de un tuitero en esta red social. Añadía que "no presenta titulación universitaria" y que "no se tiene que publicar en el BOE".

Además, explicaba en su mensaje que tendría que "devolver el dinero cobrado". Dicho tuit se movió en redes sociales a una gran velocidad, pero sin que se hubiera contrastado. Los periodistas de Maldita.es se encargaron de desmentirlo y demostraron con pruebas que se trataba de una falsedad.

Desde la institución académica aseguraron en su momento que la esposa del presidente del Gobierno no había sido cesada. Su situación seguía siendo la misma de siempre, sin ninguna novedad.

Imagen de Begoña Gómez en un acto tras la Cumbre del G20 en Roma
Begoña Gómez, en un acto con su marido | Huffington post

El autor de ese contenido en redes sociales era una persona que se pronunciaba bajo el nombre de Juan Pardo. A través de su blog ya había difundido con anterioridad otras noticias falsas, como se acabó demostrando.

Hay que decir que en aquel momento, Begoña Gómez desempeñaba la función de codirectora del Máster en Transformación Social Competitiva. También trabajaba como profesora en la titulación, además de ser directora de la Cátedra extraordinaria para la Transformación Social Competitiva.

Cuando se buscó algún tipo de información sobre el posible despido o cese de la esposa de Pedro Sánchez no se encontró nada. Solo había constancia de ese tuit publicado por un internauta, que por lo visto en el pasado, no presentaba demasiada credibilidad. 

No había ni rastro de esa presunta decisión que había tomado el "claustro de doctores y catedráticos". El cualquier caso, la persona que se encargó de publicar ese bulo consiguió lo que se propuso, darle una gran repercusión. Así lo demuestra el hecho de que tuviera unos 5.000 retuits.

Además, hay otro aspecto que le dejaba en evidencia. En ningún momento aportaba pruebas sobre todo lo que dice.

Un usuario de la red social quiso conocer más detalles de ese supuesto despido y le preguntó por las fuentes. Pardo solo dijo que "el viernes se la expulsó", pero sin dar más datos. La Universidad lo desmintió todo.

Begoña Gómez y la homologación de sus estudios

El citado tuitero defendía la expulsión de Begoña Gómez. A preguntas de algunos seguidores les remitía al "claustro universidad Complutense", que se trata del órgano de representación de la comunidad universitaria. En ese departamento tampoco se hace referencia al asunto.

Incluso en una de las contestaciones que ofrece enlaza a un artículo de OK Diario de noviembre de 2020. En él hablaban de que no reunía las condiciones para ocupar ese puesto, pero sin mencionar nunca su exclusión de la actividad docente.

Begoña Gómez en un primer plano
Begoña Gómez fue víctima de más de una mentira de la red | GTRES

Unos días antes aseguraba en su cuenta que carecía de titulación acreditada como doctora, investigadora o profesora con plaza fija. "Su supuesta titulación en marketing no es tal, nunca fue una licenciatura oficial homologada", explicaba.

El caso de Begoña Gómez no es una excepción. En Maldita.es ya habían desmentido bastante contenido publicado por este usuario que se acabó convirtiendo en un bulo.