Antonio David Flores no puede ser más feliz junto a Marta Riesco. Y buena prueba de ello son las románticas imágenes que comparten en redes sociales.
La parejita derrocha complicidad y ya no se esconden, habiendo hecho frente a una etapa llena de ataques y críticas.
Recientemente, la reportera y el exguardia civil volvían a estar en el punto de mira por sus buenos actos.
Y es que decidían repartir comida a gente sin hogar. Sin embargo, eso ha llevado a que les acusen de "blanquear su imagen, de hipócritas e incluso de haber pactado las imágenes a cambio de dinero".
Unas acusaciones ante las que Riesco no dudaba en defenderse. "Hay gente muy tonta y creen que podemos utilizar esto para ganar dinero o lavar la imagen", se lamentaba en redes sociales.
"De verdad, no se ha pactado, no se ha cobrado, no ha sido premeditado, se ha hecho con el corazón y por qué a la gente le cuesta entender que se hagan las cosas para ayudar", alegaba.
"¿Vivimos en una sociedad tan mierda que cada vez que alguien hace un gesto solidario no se cree?"
Ojalá los que critican se dedicaran a aportar un pequeño granito de arena. Dejad a la gente ser feliz", sentenciaba.
Pese a ello, parece que nada puede empañar la felicidad de la parejita. Y es que tal y como compartía Marta con sus seguidores, su relación sigue adelante "contra viento y marea".
"Te besaré, como nadie en este mundo te besó. Te amaré con el cuerpo, con la mente, con la piel y el corazón", era la romántica dedicatoria que le hacía la reportera a su chico.
Eso, mientras Olga Moreno sigue curando sus heridas habiéndose apoyado en su familia y amigos.
De hecho, incluso se ha animado a participar en los debates de Supervivientes como vigente ganadora y pasa mucho tiempo con sus excompañeros en Honduras y el resto de colaboradores.
A pesar de que la empresaria quiso dejar claro que seguía guardándole cariño a su ex, advertía que tampoco iba a dejarse pisotear.
Así, queda claro que tampoco le ha perdonado a Antonio David su humillación pública.
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Mientras ella seguía esperando poder reconciliarse con el exguardia civil, él ya había empezado una nueva relación a sus espaldas.
Un duro golpe que la hundía por completo y que la llevaba a aceptar que su matrimonio se había acabado.
Así, ahora parece que Olga ya no quiere saber nada de amor y sigue su propio camino.
"Ya no me muero por nadie, que no se muera por mí, si muero que sea de ganas de tanto y tanto vivir", aseguraba recientemente como toda una declaración de intenciones.
Por su parte, el padre de Rocío Flores sigue enfocado en su guerra contra La Fábrica de la Tele y Mediaset. De hecho, hace poco acudía a mostrarle su apoyo a Chayo Mohedano en su juicio, ya que asegura sentirse identificado.
"La injusticia que han sufrido en esa casa, en esa familia, el acoso mediático al que han sido sometidos... en mi caso ha sido exactamente igual", señalaba.
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"El balance que te puedo hacer es positivo porque he salido de esa empresa. Estoy muy contento de haber salido de ahí y reinventarme".
"Estoy cosechando éxitos y teniendo muchos apoyos", reconocía. Además, parece que tiene grandes planes de futuro con Marta Riesco.
"Me quiero casar, nadie me lo ha pedido", dejaba caer la reportera. "El tiempo pondrá a todo el mundo en su sitio, las cosas no hay que forzarlas. Yo pienso de ellas cosas maravillosas. Ojalá todo el mundo reme a favor. El amor nunca es algo mal".