Anabel Pantoja no puede estar más orgullosa de su nueva imagen y presume de sus imponentes curvas cada vez que tiene oportunidad.
Tras mucho tiempo aguantando mordaces críticas sobre su aspecto, tanto en televisión como en redes sociales, la prima de Kiko Rivera ha demostrado tener una gran confianza en si misma.
Tanto es así, que Anabel terminaba convirtiéndose en una impulsora del 'body positive', ayudando con ello a muchas mujeres.
La colaboradora deSálvamedefiende la idea de que todos los cuerpos son bellos, con o sin kilos de más, e incluso se atrevía a desnudarse en directo.
Durante la fuerte nevada que caía en enero sobre Madrid, la sobrina de Isabel Pantoja aceptaba el reto de posar sin ropa sobre la fría nieve. Un momento que terminaba pasándole factura, ya que algunos de sus compañeros no dudaban en hacer crueles comentarios desde plató.
"Yo soy la primera que me río", aseguraba al respecto. "¿Tú te crees que salí por el tremendo cuerpazo que tengo? Pues no, salí porque es un reto que han hecho muchos famosos y me hacía ilusión hacerlo en mi programa".
Además, también ha tenido que hacer frente a la peor cara de las redes sociales, donde sus fotos se han llenado de terribles ataques.
"Lo de que me estoy poniendo como una panceta, que baje de peso... ¿Os molesta? Porque si queréis borro la foto a los que os moleste. ¡PUES NO!", protestaba en una ocasión.
La imagen renovada de Anabel Pantoja
Ahora, y tras haberse sometido a una liposucción que casi le cuesta la vida, Anabel presenta una imagen completamente renovada. "Me quitaron 8 litros de grasa y casi me desangro".
Eso le ha dado todavía más seguridad en si misma, por lo que no duda en posar en bikini o bañador luciendo su nueva figura.
Sin embargo, el proceso no ha sido nada fácil y lo ha pasado bastante mal durante el postoperatorio, poniendo en riesgo su propia salud.
«Estaba pálida, no tenía ganas de comer y a la vez un hambre mortal, pero no me entraba nada y vomitaba», confesaba durante su exclusiva a la revista Lecturas. "He tenido unos dolores brutales", "estuve siete horas y media en quirófano" y "cuando me quité la faja, me desmayé", eran algunas de sus otras impactantes declaraciones.
Pasar por quirófano no es el único cambio importante que Anabel ha hecho en su vida. También ha decidido cambiar por completo sus hábitos alimenticios e instaurar una férrea rutina de deporte para mantener su figura.
Ahora, la Pantojita de Canarias es más consciente que nunca de la importancia de cuidarse ya no solo por estética, sino también por salud.
Y, tremendamente orgullosa de los avances que ha hecho, no duda en posar haciéndole competencia a otras reinas del verano como Pilar Rubio, Ana Obregón o Lara Álvarez.
En años anteriores, sus posados en el Parque Warner Beach daban el pistoletazo de salida al verano, y ahora es la prima de Kiko Rivera la que ha cogido el relevo.
Conocida por ser una mujer real, llana, sin complejos, Anabel posa espectacular con un bikini negro en varias atracciones acuáticas del parque.
Y, gracias a ello ha conseguido embolsarse una nada despreciable suma de dinero. Entre las condiciones que habían negociado, se encuentra posar en bañador o bikini en el agua, tirarse de un tobogán y posar para los medios en el photocall con declaraciones incluidas.
Según indica el diario La Razón, Anabel ha cobrado entre 8.000 y 9.000 euros por ese día de trabajo. Por tanto, cuenta con un caché bastante alto capaz de competir con otras celebrities que presumen de un físico imponente.
Sin duda, lo que gana de la sobrinisima de Isabel Pantoja es su naturalidad, buena vibra y simpatía, con la que es capaz de bailar sin vergüenza ante sus seguidores. Eso ayuda también a que cada vez más mujeres se sientan identificadas con ella, y un estereotipo de cuerpo normal, alejado de la ilusión que pretenden vender las redes sociales.