Anabel Pantoja no puede considerarse una persona discreta. A pesar de que tenía órdenes de la dirección de Supervivientes de no hablar de nada del exterior, no consiguió respetar las normas. Esa metedura de pata le puede costar muy caro.
Era una de las visitas más esperadas de esta edición. El reencuentro con su novio, Omar, reunía todos los ingredientes para convertirse en uno de los momentos más deseados de la edición. Sin embargo, se fue de la lengua y comentó cosas del exterior que no debía.
Esta acción tendrá sus consecuencias, sobre todo para los familiares de otros concursantes. La organización ha decidido que a partir de ahora los encuentros con gente del exterior se realicen en compañía de alguien del espacio. No habrá encuentros en solitario.
Se trata de un gesto bastante grave que ha obligado a la colaboradora de Sálvame a pedir disculpas. En cualquier caso, tampoco se le vio muy preocupada. Fue un perdón un tanto tibio.
Saltándose todas las normas del concurso y como si estuviera en solitario con Omar Sánchez, no dejó nada por contar.
Con anterioridad ya había retransmitido su viaje y estancia en Honduras a través de las redes sociales. Algo que posiblemente tampoco agradó a la dirección de Supervivientes, que posiblemente hubiese querido mantener en secreto su presencia.
En cualquier caso, tras el reencuentro con su pareja y Lola en Playa Destierro, empezó a desvelar demasiados temas del exterior. Hizo un repaso a todo lo ocurrido en la isla, pero también a lo que pasaba en España. Con pelos y señales.
En vista de su comportamiento, la dirección del programa optó por amonestarla e incluso amenazó con una posible sanción económica. Y todo ello, pese a las advertencias que había recibido con anterioridad.
A todos los familiares y amigos que acuden a la isla a hacer una visita se les obliga a guardar silencio. A ser discretos y a no desvelar nada de fuera. Así se evita condicionarles.
La colaboradora de Telecinco se ve obligada a pedir disculpas
Pasados unos minutos, y más en frío, la sobrina de Isabel Pantoja pidió "disculpas a todos" por su actitud. Consciente del daño que pudo haber hecho al resto de participantes. A partir de ahora la organización tendrá que tomar cartas en el asunto para que no se repita dicha actuación.
La colaboradora señaló que "sinceramente, hablándolo delante de la cámara, no pensaba en nada". Solo se le ocurrió decir que "pensaba que estaba en una isla con mi novio y una amiga".
Una excusa que no fue aceptada por todo el mundo. Acostumbrada a participar en este tipo de espacios, ella sabe lo importante que resulta disponer de noticias del exterior. Así resulta más sencillo poder encarar la recta final del concurso.
Pese a que "no era consciente, espero que no repercuta de ninguna manera y asumo toda mi culpa y consecuencias". Este gesto sí que pudo ser visto por algunos con buenos ojos. Como una autocrítica.
No es fácil que Anabel Pantoja entone el mea culpa, y en el último programa de Supervivientes lo hizo.
Reconoció que "quitando lo de Sandra, creo que lo demás eran comentarios limpios y opiniones del concurso", tratando de justificarse. En cualquier caso, admite que actuó de mala manera y que "no hay excusas". Por eso, "solo me queda pedir perdón".
El concurso no le resultó nuevo a la sobrina de Isabel Pantoja, que ya había pasado por el espacio hace un tiempo con poca fortuna. En cualquier caso, ya dejó entrever hace unos días que no le importaría repetir experiencia. Otra cosa es que la organización decida contar con ella en vista de lo ocurrido ahora.