No hay día que Ana Rosa Quintana no genere polémica desde su programa matinal de Telecinco. La periodista ha encontrado la plataforma perfecta para dar su opinión abiertamente sobre cualquier cuestión, y de un tiempo a esta parte ha demostrado que no hay nada ni nadie que le pueda parar los pies. Excepto la audiencia. En el programa de hoy, martes 24 de febrero, sus declaraciones han encendido una mecha difícil de parar y que pone en cuestión su profesionalidad.
Es habitual que cuando la presentadora muestra su parecer sobre la actualidad política, muchos contrarios reacciones de manera negativa, pero en esta ocasión los espectadores se han puesto de acuerdo en sus críticas pues ha tocado un tema que nos afecta a todos: la pandemia del Covid-19.
«España, el país con mayor tasa de mortalidad del planeta»
Las últimas cifras registradas por el Ministerio de Sanidad reflejan que la tercera ola está siendo controlada. En cuestión de semanas, España ha pasado de ser una zona de riesgo extremo con una incidencia acumulada de casi 1.000 casos por 100.000 habitantes, a registrar 235. Sin duda una bajada considerable que invita al optimismo. Sin embargo, desde 'El programa de Ana Rosa' no lo ven tan claro.
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Cierto es que el número de nuevos contagios ha descendido, pero no así el caso de fallecimientos como consecuencia del virus. Las víctimas siguen siendo elevadas y en ello se ha amparado Ana Rosa Quintana para afirmar de manera rotunda que España es «el país con mayor tasa de mortalidad del planeta tras un año de pandemia».
Su manera rotunda de considerar que nuestro país encabeza la lista de lugares del mundo con mayor número de fallecidos, hacía pensar que dicha información es cierta. Si no fuera porque los datos revelan la auténtica verdad: España ocupa el puesto número decimosegundo como el país con más muertos por Covid-19 por 100.000 habitantes.
Solo estuvimos en el segundo puesto al inicio de la pandemia. Y de eso hace un año. En la actualidad, por delante de nosotros se encuentran países como Bélgica, Eslovenia, Reino Unido, República Checa, Italia, Portugal, Estados Unidos, Bosnia y Herzegovina, Macedonia del Norte, Hungría y México. Por lo tanto, no Ana Rosa, no somos el país con mayor tasa de mortalidad.
Si a lo que se refería Ana Rosa Quintana era la cifra total registrada de fallecidos desde el inicio de la pandemia, tampoco España encabezaría la lista. Estados Unidos, Brasil, México, India, Reino Unido, Italia, Francia, Rusia y Alemania están por encima de nosotros.
Las redes tachan a Ana Rosa de «mentirosa»
Dar un dato tan importante y con tanta trascendencia social requiere un poco más de investigación. Sobre todo si se presume de ser un programa veraz con periodistas y expertos reconocidos. Así pues, los espectadores y usuarios de las redes sociales se han puesto manos a la obra para desmentir las declaraciones de Ana Rosa con toda clase de críticas en las redes sociales.
«Manipuláis con cualquier gilipollez»
Pero esta no ha sido la única ocasión en que Ana Rosa ha sido pillada con el carrito del helado. Ayer mismo, con motivo del 40 aniversario del golpe de Estado del 23-F y la visita del rey Felipe VI, el programa de Ana Rosa comentó el momento en que Pablo Echenique, portavoz de Unidas Podemos, pasó por delante del rey.
«Todas las autoridades pasaban por delante del rey, le mostraban sus respetos, todos con la mano en el pecho, con inclinación de cabeza, y hemos visto al portavoz de Podemos que en vez de pasar por delante, yo no sé si esto es lo normal, está mucho más atrás y pasa sin siquiera mirar al rey» comentaban en el paltó. Ana Rosa intervino, señalando las dificultades físicas de Echenique, pero insistiendo en que: «Pararse yo creo que sí se puede parar».
Estas declaraciones han hecho reaccionar al portavoz de Unidas Podemos publicando un mensaje en Twitter donde explica qué hizo al pasar ante el rey: «Estimada @anarosa, con la derecha conduzco la silla y la otra no la puedo levantar, así que llevarla al corazón... Me paré el mismo tiempo que todos, incliné un poco la cabeza y di los buenos días al rey, solo que fuera de tu encuadre. Ya manipuláis con cualquier gilipollez».