Hace cuatro años que Terelu Campos se sometía a una doble mastectomía tras superar un segundo cáncer de pecho.
"Me sigo revisando periódicamente y me queda un año y pico de medicación. Ahora se han cumplido cuatro años del segundo cáncer. Son, como mínimo, cinco años de medicación", confesaba hace poco.
Además, también reconoce que todavía siente un poco de miedo cada vez que le toca ir a revisión. "Cada año tengo más miedos acerca de mi cáncer", admite.
Sobre todo, porque después de haber supera una primera vez la dolencia y pasar cinco años tranquila, el cáncer reaparecía con fuerza. Algo que le generaba, tanto físicamente como mentalmente, muchas inseguridades.
"Muchas veces pienso que prefiero no dejar de estar medicada nunca", apuntaba. Y la hija de María Teresa Campos también es bastante supersticiosa con las fechas de las revisiones. "No me gusta tener cita con el médico en diciembre. El primer cáncer me lo detectaron ese mes", explicaba.
Así, Terelu afirma vivir en cierta guerra constante con su propio cuerpo, ya que considera que la ha abandonado en el momento más importante.
"No lo mimo, pero la verdad es que mi cuerpo también se ha portado regular conmigo. Así que... que le den por saco", admite. Y tampoco se ha planteado arreglarse el pecho tras la operación.
"El pecho es lo que es. Es lo que hay. No hay modificación. No creo que pueda mejorarlo porque hay unas partes en las que el músculo tiene que estar de determinada manera y eso hace que debajo de la axila tenga mucha carne. Eso no puedo reducirlo", asegura.
Alejandra Rubio ha vivido de cerca el estado de salud de su madre
Sin contar con que muchas veces las cicatrices le dan problemas para hacer vida normal: "Me impiden alargar el brazo hasta cierto punto, cargar determinado peso", señala.
De momento, la madre de Alejandra Rubio no ha vuelto a tener ninguna recaída y espera seguir igual.
Y ya tiene marcada en el calendario la próxima revisión a finales de año. Aunque, por suerte, se trata "solo de una eco de mama, tórax y analítica", apunta.
"La resonancia me mata. Lo paso fatal. La doctora se mete conmigo a darme la mano mientras me la hacen. Tengo una claustrofobia espantosa", relata acerca del complicado proceso.
A pesar de que ahora la televisiva vive más tranquila, "eso no quita que antes de cada revisión esté inquieta".
Hace poco, Campos se llevaba una gran alegría después de recibir el premio 'luchadora' en la Gala contra el Cáncer de Marbella.
"En su doble calidad de paciente y personaje público, su actitud ante la enfermedad y su manera de afrontarla", reconocían su apoyo a la causa.
"Y mostrando con valentía todos los cambios experimentados, ha podido ayudar a otras personas a afrontar, con serenidad y decisión, su particular lucha contra el cáncer".
Una gala muy especial que fue presentada por Eva Ruíz y el coreógrafo y amigo de Terelu, Poty Castillo, quien deshacía en mimos y halagos a su compañera.
En este evento tan especial, Terelu estuvo acompañada por su inseparable hija, Alejandra Rubio, y su mayor apoyo.
La joven vivía muy de cerca y a temprana edad las consecuencias de esta terrible enfermedad en una persona tan importante para ella.
Justo por eso, siempre se ha volcado al máximo en la lucha por erradicar esta enfermedad, además de tener muy presente a Mila Ximénez.
"Alguien a quien he visto luchar aún cuando no quería hacerlo", decía la hija de María Teresa Campos sobre su compañera deSálvame.
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