La carrera para encontrar una vacuna segura y efectiva contra el Coronavirus ha dado lugar a decenas de proyectos que pelean por llegar primero a la meta. Uno de los mejor situados es el del Centro de Investigación de Vacunas de Estados Unidos y la compañía Moderna, que ya han realizado sus primeros ensayos en seres humanos.
La vacuna Moderna Terapeutics ya ha sido probada en varios ensayos con voluntarios, que han experimentado los primeros efectos secundarios donde destacan los desmayos y la fiebre alta. Uno de estos voluntarios es Ian Haydon, un joven de 19 de Seattle cuya experiencia en el ensayo revela una experiencia verdaderamente preocupante.
Según su experiencia recogida por el diario médico STAT, el joven desarrolló fiebre por encima de los 39,5 grados doce horas después de recibir la segunda dosis. El joven acudió a urgencias y los servicios sanitarios pudieron atenderle. Sin embargo, al llegar a casa se desmayó.
«Entiendo que compartir mi historia va a ser aterrador para algunas personas», dijo Haydon. El joven no quiere que su historia cause ningún tipo de aversión hacia las vacunas en general o hacia esta vacuna contra el Coronavirus.
En una entrevista a la CNN ha explicado por qué cuenta su experiencia. Según dice, quería «contrarrestar la desesperación de algunas personas por lanzar una vacuna al mercado, sin tener en cuenta las consecuencias». En su opinión, «hay que encontrar una dosis que haga que el cuerpo produzca anticuerpos, pero que no provoque demasiados efectos secundarios».
Otros efectos secundarios
Otra de las vacunas bien posicionadas es la Oxford, que ha anunciado que podría estar lista en el mes de octubre. Las pruebas de la vacuna contra el Covid-19 desarrollada por la Universidad de Oxford, en el Reino Unidos, comenzaron el pasado fin de semana en Brasil, y contó con la participación de 3.000 voluntarios en Sao Paulo y Rio de Janeiro.
Por su parte, el pasado 23 de junio la Universidad de Séchenov, en Moscú (Rusia), hizo público un informe sobre las pruebas de la vacuna contra el Covid-19 que están practicando en la institución. En este caso, también se notificaron efectos secundarios.
Un grupo de 20 voluntarios han recibido una inyección del fármaco experimental, según cuenta el informe. Algunos de estos han experimentado un ligero aumento de la temperatura y dolor de cabeza, aunque señala que los síntomas cesaron en las siguientes 24 horas.