El pasado 15 de septiembre de 2019 a las 6:30 de la mañana, un Kamikaze, ebrio y conduciendo en dirección contraria, acabó con la vida Víctor. El suceso tuvo lugar en la M-50 de Madrid cuando el joven se iba a su trabajo.
El próximo día 17 de septiembre comienza el proceso legal para determinar las causas y la posible condena contra el conductor. Se le imputan varios delitos como el de conducción temeraria y circular por encima de los límites establecidos de velocidad.
La víctima era un joven de 20 años que se dirigía a su puesto de trabajo en una conocida marca de supermercados. La trágica muerte de él acentúa la situación que vivía la familia, ya que el año anterior había perdido a su otro hijo.
Después de todo, el entorno más cercano de Víctor clama justicia y que el acusado pague por lo que hizo. Estarán muy pendientes del juicio que se celebra el próximo viernes y no dudarán en tomar las medidas oportunas.
Comienza el juicio contra el conductor que acabó con la vida de Víctor
Los hechos que envuelven al trágico incidente han sido investigados por las autoridades y profesionales para ofrecerlo como pruebas en el proceso legal. Las condiciones en las que se dio elimina totalmente que fuera un acto involuntario, por lo que la condena será mayor.
En torno a las 6:30 de la mañana de un día lluvioso de septiembre, un conductor con claros signos de embriaguez conducía su vehículo por encima de los límites. La carretera cuenta con una limitación de 100 y este circulaba a 139 km/h. El suceso tuvo lugar en el tramo que une las localidades de Fuenlabrada y Arganda de la autopista M-50 de Madrid.
El kamikaze circulaba en dirección contraria a pesar de las señales de los vehículos que iban en el sentido correcto de la marcha. Uno de los coches no pudo esquivarle y colisionaron. En el momento del impacto las autoridades determinaron que la velocidad de este había alcanzado los 146 km/h.
El golpe fue descomunal, ya que "fue levantado del suelo desde la parte delantera izquierda por el vehículo contrario, que pasó por debajo del mismo" según apunta La Razón. Posteriormente, realizó un giro de 180 grados y terminó impactado en las paredes de un túnel cercano.
Víctor falleció a consecuencia de las heridas y golpes que recibió tras el siniestro. Sin embargo, el conductor temerario no sufrió más que magulladura y algunos arañazos. Esto sorprendió a los equipos de rescate debido a la magnitud del suceso.
A pesar de todo, la actitud del conductor sorprender mucho, ya que no ha mostrado ningún tipo de arrepentimiento y ha asumido el suceso. En la celebración del juicio se sentará en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Madrid.
Las investigaciones determinaron que la visibilidad era la adecuada, a pesar de las condiciones climáticas, y que no se produjo ningún movimiento de evasión. Estas dos causas también formarán parte de la acusación y puede agravar la condena,
La fiscalía solicita una pena de 15 años por los delitos de homicidio, conducción temeraria agravado por desprecio por la vida y conducción temeraria. Desde que el siniestro tuvo lugar, el hombre en cuestión se encuentra en prisión preventiva.
Además la fiscalía solicita una indemnización a la familia del fallecido de 220 000 euros, que ya han percibido 180 000. Además, una cantidad de 12 500 a la novia, el tío y las dos abuelas del fallecido, así como 394 euros para reparar los destrozos de la vía.
Este suceso ha dejado a una familia rota, demandan justicia para su hijo y para que el hombre que lo asesinó reciba las consecuencias.