Pfizer acaba de anunciar que la vacuna contra el coronavirus para los niños estará lista el próximo otoño. Así lo ha anunciado el creador de la compañía y director general, Ugur Sahin, al diario alemán Der Spiegel: en junio se empezará a vacunar a los niños de 12 a 15 años, y a partir de septiembre a todos los mayores de seis meses.
Se trata de un anuncio importante, porque permitirá cubrir un alto porcentaje de la población que ahora mismo no puede vacunarse y que sin embargo puede transmitir el virus. Sahin ha asegurado que la vacunación de los niños será un paso decisivo para superar la pandemia.
La previsión es que Europa alcance la inmunidad de la mayoría de la población a finales de verano. Pero el director de Pfizer ha recordado que esta inmunidad no incluirá a los niños. Hasta ahora la vacuna solo se ha testado en mayores de 16 años, a pesar de que la enfermedad también ha afectado a los niños y les ha dejado secuelas.
«Dentro de unas semanas, mucho antes de lo esperado, se podrá administrar a menores a partir de 12 años», ha anunciado Sahin, «y a partir de ahora puede ir muy deprisa». Las pruebas realizadas hasta ahora muestran unos resultados alentadores en cuanto a la seguridad y la eficacia de la vacuna en los niños, y por eso Pfizer solicitará la autorización para administrar la vacuna a niños de más de seis meses desde el próximo septiembre.
Los ensayos en menores de entre 12 y 15 años han sido un éxito, y la compañía ya ha solicitado la autorización en Estados Unidos. En Europa, la fase de ensayos ya está muy avanzada y el miércoles que viene pedirán a la Agencia Europea del Medicamento (EMA) la autorización de la vacuna a los menores de más de 12 años.
Calendario por franjas de edad
Para la franja de edad de 12 a 15 años, Pfizer prevé que se pueda empezar a administrar a partir del mes de junio. Para los menores de dos años, se está realizando un segundo ensayo clínico que ya está muy avanzado. «Si todo va bien podríamos solicitar la autorización de la vacuna para todos los menores de cada segmento de edad en varios países», ha explicado Sagin. Están a la espera de los resultados, pero los que ahora manejan hacen pensar en una eficacia del 100%.
Por lo tanto, los niños tendrán que esperar un poco más para ponerse la vacuna, motivo por el cual los expertos recuerdan la importancia de mantener alta la guardia contra posibles infecciones. Precisamente esta semana se ha conocido la aparición de un brote de grandes dimensiones en un colegio de Arnedo (La Rioja) después de una fiesta infantil. Los niños no solo pueden tener la enfermedad sino que son también transmisores, y en plena campaña de vacunación, es necesario redoblar la precaución con este grupo de población.
Una tercera dosis de Pfizer
Precisamente esta semana, la compañía Pfizer/BioNTech ha confirmado que las personas vacunadas necesitarán una tercera dosis al cabo de 9 meses. Según Sahin, «la protección disminuye lentamente con el tiempo, ya los seis meses la protección ya no es del 95% sino del 91%, y a los ocho meses los anticuerpos merman claramente». Para volver al 100% de la protección hará falta, por lo tanto, una tercera dosis.
«La tercera dosis a los 9 meses, o como muy tarde al cabo de un año, puede ayudar a la protección como vacunación de refuerzo», ha añadido, «y luego hará falta otro pinchazo cada año o quizá cada 18 meses, como la gripe estacional».
Por otro lado, el responsable de Pfizer se ha mostrado a favor de levantar las restricciones para las personas vacunadas y permitir así «recuperar la normalidad». Aun así, reconoce que será un tema delicado porque puede llevar a discriminaciones, y aconseja «no hacerlo demasiado pronto, para no crear situaciones de envidia».
La vacuna frente a la variante india
La previsión del doctor Sagin es que a finales de mayo o junio estarán vacunados el 50% o el 60% de los europeos, y se podrán ir levantando poco a poco las restricciones. Para finales de agosto se espera que el 70% de la población europea ya está vacunada, y se pueda proclamar el fin de la pandemia y la llegada de la nueva normalidad.
El último escollo que queda por superar es el de la variante india. Estos días, el mundo está asistiendo al preocupante escenario que se vive en la India, con 2.000 muertos diarios y los hospitales saturados y sin oxígeno. La imagen de lo que muchos consideran casi como una nueva pandemia contrasta con el optimismo de los países occidentales, que intentan apretar el acelerador de la vacunación.
Por eso la prioridad de los gobiernos es que la nueva cepa mutante de la India, que se prevé más contagiosa, no entre en los países occidentales. Varios países, entre ellos España, han cerrado las fronteras para personas procedentes de la India. Y a largo plazo, la duda es si la nueva variante podría escapar a los anticuerpos de las vacunas. Sahin confía en la efectividad de su vacuna contra la variante india, porque «tiene mutaciones que ya hemos estudiado y contra las cuales nuestra vacuna funciona».