La cesta de la compra se ha encarecido en los últimos tiempos. Productos básicos de alimentación han visto incrementado su precio de manera importante. Sin embargo, todo esto se ha visto eclipsado por el incremento en la factura de la luz.
Poner la lavadora o encender el horno es casi un lujo para algunas familias, que ya empiezan a notar en sus bolsillos estas subidas.
El incremento de la tarifa eléctrica se está trasladando al supermercado, a una nuestra compra. La fabricación o mantenimiento de ciertos productos se ha visto encarecida por el aumento del precio de las eléctricas.
Y eso acaba repercutiendo en el consumidor final, sobre todo en artículos que pueden considerarse básicos. Que no deben faltar en una despensa o frigorífico.
Es el caso del aceite de oliva, que ha visto como se encarecía un 20%, hasta alcanzar los 5 euros el litro. Pero también se nota en el de girasol. En apenas un año ha pasado de costar 1 euro el litro, a más de 1,5 euros.
Otro artículo de la cesta de la compra que ha sufrido este aumento han sido los huevos. Hace unos meses se llegaba a pagar en torno al euro por una docena. Hoy esa cifra se eleva hasta los 1,40 euros como mínimo.
El tercer artículo que podría considerarse como de esencial en cualquier carrito de la compra es la leche. Tampoco se ha librado de esta batalla de precios. El litro ronda en torno a los 90 céntimos.
Nuestros bolsillos también empiezan a notar los incrementos en las fruterías. En estos momentos se están pagando 1,80 euros por el kilo de manzanas, cuando un año antes apenas llegaba a los 1,40 euros. Por su parte, los plátanos están costando por lo general en torno a los 2 euros el kilo.
Una compra sin freno en el precio
Esta subida también empieza a ser notable en otros artículos, que aunque no son imprescindibles, sí que forman parte de la cesta de la compra. Se tratan de los zumos y refrescos. Organizaciones de consumidores aseguran que han visto aumentado su precio un 7,4%.
En este caso, hay cierta justificación. No hay que pasar por alto que elevaron su IVA del 10 al 21%. Hace un año, una lata podría costar 60 céntimos, mientras que su valor se eleva hoy a los 85.
También se puede apreciar un repunte en el coste de la carne. En cualquier caso, se trata de algo más insignificante, ya que apenas llega al 3%.
Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) estiman que el precio de la cesta de la compra ha crecido un 1,5% desde enero. Se aprecia como hay grandes diferencias entre los alimentos considerados como esenciales, y los que no lo son.
En cualquier caso, hay que decir que resulta complejo abordar este asunto con cifras concretas. Sobre todo porque influyen en este aspecto detalles como el sitio de compra, ya sea supermercado o tienda, o la ciudad.
También debe tenerse en cuenta la presencia de las marcas blancas. El comprador de estos artículos accederá a productos más económicos, y en muchas ocasiones sin que se vea resentida la calidad.
La cesta de la compra es mucho más cara que hace un año. Este detalle ha pasado desapercibido para el consumidor, que ha visto como esto se quedaba en un segundo plano ante las subidas de la luz.
Este mes de septiembre ronda entre los 150 euros el megavatio/hora, marcando prácticamente a diario récords históricos. Sorprende sobre todo que se produzca en una época de calor, ya que lo habitual sería elevar los precios con la llegada del frío. Aquí sería cuando más uso se hiciera de los electrodomésticos y de las calefacciones.