Christian Brueckner es el alemán de 44 años sospechoso de haber matado a Madeleine McCann en el Algarve portugués. El hombre está preso, aunque no por ese crimen, y aun así ha conseguido burlarse de la Policía y de toda la investigación.
El sospechoso es un pedófilo y violador condenado y que está recluido en Oldenburg, una cárcel de alta seguridad. Aun así, ha logrado burlar sus medidas de vigilancia y filtrar a la prensa una caricatura. En ella, Brueckner se ríe de los investigadores alemanes, a los que prácticamente acusa de quererle entre rejas a toda costa.
La Policía alemana cree que Christian secuestró y asesinó a Madeleine McCann en el año 2007. El problema es que no tienen pruebas porque el cuerpo de la niña no ha aparecido tras 14 años de búsqueda.
La pequeña desapareció en Praia da Luz, en Portugal, el 3 de mayo de 2007. Sus padres acostaron a sus hijos y se marcharon de tapas a un restaurante cercano cond dos amigos. Cuando llegaron, Madeleine no estaba en la habitación.
Christian Brueckner vivía en aquel momento en una furgoneta camper cerca de Praia da Luz. Desde 2017 es oficialmente el principal sospechoso de la policía, aunque todavía no se le ha interrogado por el caso.
El hombre ya tenía antecedentes por pedofilia y violación y actualmente cumple condena por uno de esos delitos. Fue condenado a siete años de cárcel por violar a una anciana, precisamente, en Praia da Luz.
Hace unos meses, Brueckner publicó un boceto donde declaraba su inocencia del caso y acusando a los investigadores. Representó a los fiscales en un restaurante pidiendo "filete de forense", insinuando que estaban manipulando las pruebas.
Ahora, el sospechoso ha filtrado una caricatura donde prácticamente se ríe de todo el sistema judicial alemán. En el dibujo aparece el fiscal preguntando "si hay algo nuevo" a una persona tras una cortina. Esa persona es, al parecer, un vidente que cobra 5 € por consulta.
El vidente es una referencia a Michael Schneider, un clarividente alemán que ha ayudado a la Policía con el caso. Fue él quien dio a los investigadores las coordenadas exactas donde, supuestamente, estaría enterrada Madeleine.
Por el fondo de la imagen aparecen también tres jueces durmiendo en el banquillo. Y el sospechoso se ha representado a sí mismo preguntándose qué está pasando.
Nuevas pistas sobre el crimen de Madeleine McCann
De momento, la fiscalía alemana trabaja para construir un caso contra Christian Brueckner. Están convencidos de que él fue quien se llevó a Madeleine para abusar de ella y que finalmente la mató. Pero sin encontrar el cuerpo de la niña o más pistas sobre su conexión con Brueckner, tendrán difícil probar nada.
El último descubrimiento de la Policía alemana es una especie de zulo donde la niña pudo estar retenida. Se trata de una mazmorra de unos tres metros de profundidad en el domicilio de Brueckner. En ella encontraron varias muñecas y creen que la niña pudo haber estado ahí.
De hecho, los investigadores creen que el sospechoso abusó de ella en ese zulo antes de acabar con su vida. Junto a las muñecas también se ha hallado una lámpara con forma de hada que podría haber usado para tener a Madeleine más tranquila.
Es más, la Policía cree que el acusado utilizó esa mazmorra para abusar de varios menores durante mucho tiempo.
Por ahora, todo son conjeturas que no pueden ser probadas. Sin encontrar restos de ADN de la pequeña es imposible probar que Madeleine estuvo allí o que fuese violentada por Brueckner. Y si no encuentran el cuerpo, tampoco es posible probar que la matase.
Aun así, los investigadores no se rinden y trabajan incansablemente en un caso que lleva abierto más de 14 años.