La intención del Gobierno al aprobar el ingreso mínimo vital era acelerar el proceso para que el mayor número de familias pudieran recibirlo lo antes posible. Ahora, el ministerio de Seguridad Social anuncia que ha recibido en apenas tres semanas 510.000 solicitudes para recibir el ingreso mínimo vital, una cifra que ha sobrepasado todas sus previsiones.
El Gobierno no esperaba una avalancha tan gran grande de peticiones y ya ha dejado claro que la mitad de los casos serán rechazados porque no cumplen los requisitos exigidos. Esto era también algo previsible por el procedimiento establecido para su acceso.
Para acelerar los trámites y que las familias más vulnerables empezaran a cobrar la ayuda lo antes posible, el Gobierno aceptó como validación inicial una declaración de responsabilidad, aunque también advirtió que luego se tendría que adjuntar la documentación requerida para cobrar la ayuda. También anunció sanciones ante intentos de fraude.
El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha dicho que por experiencias anteriores estiman que al menos el 50% no cumplirá con los requisitos. Esto supone que, con los datos que ya se tienen, más de 255.000 de esas solicitudes serán rechazadas.
Sin embargo, todavía no se conocen las cifras finales de beneficiarios porque el Ministerio está trabajando con las comunidades para les transfieran los datos de los beneficiarios de las rentas mínimas autonómicas. «Estamos trabajando para que nos puedan transferir los datos y ver de oficio cuántos cumplen los requisitos para la Seguridad Social», ha dicho el ministro.
El ingreso mínimo vital establece un nivel de renta garantizable diferente para cada tipo de hogar y completa las renta preexistentes hasta el umbral garantizado para cada tipo. En el caso de los hogares unipersonales se fija en 5.538 euros al año, el equivalente a una prestación no contributiva.
Se piden como requisitos la vulnerabilidad económica, un solo titular por unidad de convivencia mayor de 23 años y menor de 65 salvo que tenga menores a cargo, y un mínimo de tres años de residencia en España y doce meses de alta en la Seguridad Social.
Apoyo a Nadia Calviño
Además, el ministro de Seguridad Social ha querido dar su apoyo a la ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, tras su derrota para presidir el Eurogrupo. Escrivá ha destacado que la decisión se decantó por un voto, mientras que la última vez que se presentó un representante español la derrota fue por goleada.
El ministro se refería a la dura derrota de Luis de Guindos (PP) després de anunciar que España tendría la presidencia con total seguridad. Escrivá manda así un dardo a los populares para defender la gestión de su Gobierno y de Nadia Calviño.
En palabras del propio José Luis Escrivá, «en esto de las decisiones de la gobernanza europea en las votaciones hay distintos niveles de equilibrios, sur-norte, países pequeños y países grandes, orientación política de los gobiernos. Se mezcla todo». Pero ha recordado que Calviño tenía el apoyo de los gobiernos que representa a la mayor parte de la población europea.