La preocupación por el incremento del número de nuevos casos de coronavirus en España los últimos días no hizo más que dispararse tras los datos que se conocieron ayer. Tal y como publicó el ministerio de Sanidad, 2.935 personas han dado positivo en las últimas 24 horas, llevando a pensar que, antes de lo que hubiéramos deseado, nos encontramos ya en la tan anunciada 'segunda ola'.
Y ante esta gran subida de contagios, 1.300 respecto al día anterior, a Fernando Simón no le quedó más remedio que admitir, aunque de manera más bien difusa, que sí nos encontramos en ella.
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias respondió a las preguntas de los periodistas sobre el tema. Concretamente, aseguró que «podría ser o podría no ser una segunda ola», diciendo que se trata de una mera «cuestión semántica», aunque algunas comunidades de Extremadura o País Vasco ya hablan abiertamente de esta segunda oleada de casos.
Llamada a la calma aunque sin bajar la guardia
Simón quiso relativizar la subida de casos calificándola como «suave», argumentado que «permite la implementación de medidas de control mucho más seria y controlada». Respecto a la segunda ola, insistió en la necesidad de no crear alarmismo utilizando «un término que genere más ansiedad de la cuenta».
Ha vuelto a insistir en que aunque la situación es preocupante «no tiene absolutamente nada que ver con lo que vimos en marzo o abril». «Tenemos que seguir a alerta, hay un riesgo importante».
Respondiendo a otras preguntas, Fernando Simón ha admitido que ya hay zona donde se está produciendo una transmisión comunitario. Pese a ello, afirmaba que «no es tan importante como pueden hacer parecer las cifras.»
También ha querido valorar la situación actual de Cataluña y Aragón dando por estabilizados los brotes en esas comunidades. «Puede servir de ejemplo para otros territorios», afirmaba queriendo dejar claro que «si se aplican las medidas disponibles con contundencia un brote se puede controlar».
Finalmente, sobre los hospitales, insistía que ahora mismo no hay una situación de alto riesgo. Si bien es cierto, que reconocía que hay «dos o tres hospitales de Madrid tienen una situación más peligrosa». Sobre esta comunidad, confirmaba que es una sobre las que ahora mismo hay que «centrar la atención», como se hizo antes en Cataluña y Aragón.