Tomás Gimeno y sus hijas Anna y Olivia

La policía ya tiene el resultado de la sangre encontrada en el barco de Tomás

Lo ha confirmado ya el Laboratorio de Criminalística de Santa Cruz de Tenerife

Lo ha confirmado ya el Laboratorio de Criminalística. Los restos de sangre que se encontraron en el barco de Tomás Gimeno no son de las dos niñas desaparecidas, Anna y Olivia, sus dos hijas. Al parecer esos restos serían precisamente de él, y no de las pequeñas. Así lo han confirmado ya varios medios locales de Canarias.

Se trata de un dato bastante significativo, pues el hecho de que esa sangre hubiera sido de las niñas podría haber hecho que el caso se acercara cada vez a un crimen y no a una desaparición o secuestro, como todavía se estaría tratando.

Hay que mencionar que en el último día fueron varias las informaciones que surgieron asegurando que las investigaciones llevaban cada vez más hacía un posible asesinato de las niñas por parte del padre, pero este dato puede hacer variar el rumbo del caso, al no confirmarse que esa sangre era de las niñas.

Se trataba de uno de los datos más relevantes que estaban todavía a la espera de confirmación y que podían aportar algo más de luz al caso.

Hay que recordar, sobre el tema del barco, que el padre zarpó en él en la noche de su desaparición, es por ello que se registró más tarde, cuando fue encontrado, para tratar de dar con alguna pista sobre el caso. Fue entonces cuando se hallaron los restos de sangre.

Según se ha podido saber, el padre montó en la noche del 27 de abril, día de la desaparición de los tres, pero lo hizo solo, sin la compañía de sus hijas. Fue captado así por las cámaras de la Marina de Tenerife. Sí que es cierto, sin embargo, que un vigilante de la zona lo vio cargar varias maletas y bolsos en la embarcación.

No solo esto, sino que poco después de que las autoridades hallaran el barco flotando solo y a la deriva, se halló también, cerca del lugar, una silla de retención infantil que pertenecería a una de las niñas, recordemos que son muy pequeñas pues la mayor tiene 6 años y la menor tan solo uno.

Por el momento es toda la información nueva que se tiene sobre el suceso. Pese a que ayer se realizó un segundo registro en la casa de Tomás, al saberse que se pasó por allí antes de desaparecer con sus hijas. Sobre esto todavía no se ha informado, por lo que no se sabe si los investigadores han podido dar con pistas relevantes allí.

La declaración de la madre de las niñas

Otra de las cosas que sí se ha desvelado en el último día ha sido la declaración exacta que la madre, Beatriz, dio en su día a la Guardia Civil, después de haber denunciado la desaparición de sus dos hijas. Unas palabras en las que aseguraba que Tomás le decía que no volvería a ver a su hija y también que conocidos de él habían recibido mensajes de despedida.

«Vuelvo a hablar con él casi a las 22:00 horas y es donde me dice que no me preocupe que él va a cuidar bien de las niñas, pero que no voy a volverles a ver más. Me voy al cuartel y desde allí también hablo con él. La última vez que hablamos es a la 1:30 de la madrugada. Desde entonces tiene el teléfono apagado», aseguró la mujer.

«Me pongo en contacto además con todos los amigos del círculo más cercano y todos me cuentan que no saben dónde está, pero que también han recibido mensajes de despedida», contó también Beatriz, que asegura que los padres de él le dijeron lo mismo cuando les preguntó por Tomás, que se había marchado diciendo adiós «en un tono que ellos interpretan como de despedida».