La pandemia en España vive un momento muy preocupante. En la última semana los casos se han disparado, batiéndose varias veces el récord diario por encima de los 40.000, y se cuentan unos 400 fallecidos diarios. Los hospitales también ven como crece el número de ingresados en planta y en las UCIs.
Pese a ello, la intención del gobierno sigue siendo la misma. Sigue sin estar sobre la mesa un posible confinamiento o el endurecimiento del toque de queda. Y así lo dejaba claro este viernes el presidente Sánchez que insistía que el actual estado de alarma y las medidas actuales «están funcionando». Sánchez, que presentaba el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española en Zaragoza, también alaba la actual estrategia de vacunación.
Lo que si ha querido dejar claro es que pese a lo que él considera un éxito, no tiene que llevar a una relajación. Afirmaba que «quedan meses muy duros» y pedía no caer en errores del pasado, ya que «relajar los esfuerzos, porque si no cada avance vendrá seguido de un retroceso».
Una vez más insistía en su llamamiento a la unidad aunque se quejaba de los «ataques feroces» de la oposición o de algunos gobiernos autonómicos. Afirmaba que esto no le va a impedir seguir buscando un acuerdo entre todos, ya que «ninguna desgracia distingue de colores políticos».
Y ponía el ejemplo de la última borrasca 'Filomena'. «Nos ha vuelto a dar una gran lección, que es que ninguna desgracia distingue de colores políticos. Ni los desastres naturales, ni las enfermedades, ni los reveses económicos. Todos nuestros compatriotas padecen los mismos problemas y la respuesta de los representantes debería ser la misma. Desgraciadamente, no siempre es así», aseguraba.
Pedro Sánchez ha criticado abiertamente la falta de apoyos que ha tenido en muchas ocasiones en el Congreso de los Diputados. Eso sí, ha defendido que todo se ha suplido con los acuerdos en Europa, como el de los fondos europeos, o con las autonomías, como el acuerdo con las comunidades para empezar una estrategia de cogobernanza desde el verano.
Y aseguraba esta opción pese a que como decimos en los últimos días se han multiplicado las críticas de los presidentes autonómicos a sus últimas decisiones. Son muchos los que han pedido que se pueda adelantar el toque de queda o que se permita el confinamiento, solicitudes que han caído en saco roto.
Tiene puesta las esperanzas en la vacuna para solucionar la crisis económica
Y su discurso seguía centrado en defender el trabajo que viene haciendo Sanidad. «Tenemos una estrategia estatal contrastada. Sabemos cómo doblegar la tercera curva. Se ha aprobado por todas las comunidades autónomas, con indicadores comunes, acciones comunes, y tiempo suficiente para poder evaluar la eficacia de las medidas que ponemos en marcha. Tenemos también la experiencia acumulada y un rumbo claro de cómo hacerle frente», reivindicaba
Sánchez también destacaba lo importante de la llegada de la vacuna y no solo por sus efectos en la crisis sanitaria. «Va a ser el motor de la recuperación económica en 2021», mostrándose esperanzado, ya que «muy pronto vamos a tener más vacunados que contagiados por Covid y ya hemos superado el millón»,
Pide aprender de la segunda ola
El presidente del Gobierno ha querido insistir que ahora mismo toca remar en la misma dirección ante las malas cifras que se verán en los próximos días, como por ejemplo en la presión hospitalaria. «Nos quedan meses muy duros, pero tenemos confianza porque estamos en la buena dirección», sentenciaba.
Y pedía no volver a caer en los mismos errores. «La elección más contundente que ha dejado esta segunda ola» afirmaba que es tener claro que una mejora no debe llevar a una relajación excesiva. Así finalizaba con una petición: «Tenemos que perseverar porque estamos ante el principio del fin de la superación».