Salvador Ramos, un joven de 18 años, es el autor de la matanza que se ha saldado con 19 niños y dos adultos muertos en una escuela de Texas. Ocurrió a las 11:30 de la mañana del martes, hora local. El joven entró en el centro fuertemente armado y abrió fuego de manera indiscriminada.
Los niños fallecidos en el ataque tenían entre 7 y 10 años, y era su penúltimo día de clase ya que el jueves se iban de vacaciones. El chico disparó a su abuela antes de la masacre, y entre los fallecidos adultos hay una profesora. El tirador fue abatido por la policía, que ahora está investigando lo ocurrido.
Las autoridades han confirmado que Salvador Ramos tenía una cuenta de Instagram en la que solía subir fotos de armas. La matanza ha suscitado la reacción del propio presidente de los Estados Unidos, Joe Biden: “estoy harto y cansado de esto, tenemos que actuar”. Así han ocurrido los hechos.
El periplo del asesino de Texas
Salvador Ramos compró dos rifles de asalto el día que cumplió 18 años con el propósito de volver a la escuela de primaria donde había estudiado. Hace cuatro días colgó las fotos de sus armas alardeando en redes sociales. Ayer por la mañana, hora local en Texas, desató el peor de los horrores.
Antes de partir disparó a su abuela, una mujer de 66 años que se encuentra hospitalizada con pronóstico reservado. Luego subió al coche armado hasta los dientes y condujo hasta su antigua escuela primaria con suma frialdad. Abandonó el coche en un lugar cercano, y entró en el edificio.
Las cámaras lo captaron vestido de negro y con una metralleta semiautomática. Lo que viene después es una matanza cometida “de manera horrible”, según las autoridades. El joven abrió fuego de manera indiscriminada matando a 21 personas, entre los cuales 19 niños de entre 7 y 10 años.
Buscan una explicación
La matanza se produjo en la Escuela de Primaria Robb en Uvalde, una pequeña localidad a 140 kilómetros de la capital de Texas, San Antonio. El centro alberga unos 500 estudiantes, la mayoría de ellos hispanos. La policía no descarta una motivación racista, aunque el propio asesino tiene el mismo origen.
También te puede interesar:▶️Expertos avisan de los peligros de la hepatitis infantil
Dos de las víctimas mortales murieron antes de llegar al hospital, mientras que otros niños están siendo tratados en urgencias. Una mujer de 66 años (abuela del tirador) y una niña de 10 años se encuentran en estado crítico. En el tiroteo también murió Eva Mireles, una profesora del centro.
La policía se encuentra aún en el lugar de los hechos recabando pruebas, mientras tratan de saber más cosas sobre el asaltante. Tratan de dilucidar si tenía una personalidad atormentada o si pudo haberse radicalizado en las redes. En todo caso, se trata de un fenómeno cada vez más común.
Fue víctima de acoso escolar
Una de las últimas informaciones apunta a que Salvador Ramos sufrió acoso escolar cuando era niño porque tenía problemas en el habla. Era tartamudo y ceceaba, así que se convirtió en objeto de burlas y malos tratos. Los problemas económicos de su familia fueron también motivación del bullying.
Un hombre que responde al nombre de Santos Valdez ha explicado que él y Salvador eran amigos “hasta que su comportamiento empezó a deteriorarse”. Un día apareció con la cara llena de cortes, “y dijo que lo había hecho por diversión”. No tiene ninguna duda de que padecía trastornos mentales graves.
La policía ha registrado un camión que se encontraba cerca de donde se produjo el ataque. Creen que podría ser el vehículo con el que el pistolero se trasladó hasta el centro escolar para cometer la matanza. El acto provocó una gran consternación en el lugar, y en general en todo el país.
Otra matanza en una escuela
Con este ya van 215 tiroteos masivos en Estados Unidos este 2022, lo que supone una media de diez por semana. El presidente del país, Joe Biden, fue informado de lo ocurrido a su regreso de Japón donde estaba de viaje oficial. “Estoy candado de esto, tenemos que actuar”, transmitió.
La matanza de Texas se produce casi diez años después de otra masacre en un colegio. Ocurrió el 14 de diciembre de 2012 en una escuela de Newton, Connecticut. En aquel ataque murieron 26 personas a manos de un joven de veinte años, y la mayoría de las víctimas tenían entre 6 y 7 años.
A falta de conocer más detalles sobre la motivación del ataque, este reabre el debate sobre el uso de las armas de fuego en Estados Unidos. En sus primeras reacciones, Biden ha mostrado su intención de acabar con el lobby de las armas en el país. Algo que ya intentaron algunos de sus predecesores, sin éxito.