España encaraba las Navidades con varios días en los que los casos de Covid-19 volvieron a aumentar, después de haber conseguido reducir la incidencia durante todo el mes de noviembre y bajar, por fin, de los 250 casos por cada 100.000 habitantes en dos semanas.
Tras el puente de la Constitución, los casos empezaron a subir de nuevo y el pasado 24 de diciembre, a las puertas de Nochebuena, la incidencia había vuelto a subir hasta más de 260 casos, con varias comunidades por encima de los 300. Esto provocó que varias comunidades endureciesen sus restricciones apenas días después de haberlas suavizado para las fiestas, y todas las preocupaciones estaban puestas en qué pasaría tras las cenas y comidas familiares tan habituales.
En este sentido, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha querido agradecer este lunes el «comportamiento» de los ciudadanos durante la Nochebuena y Navidad, y ha admitido que, en general, se han respetado todas las medidas que los gobiernos, tanto el central como los autonómicos, han ido tomando.
Aun así, Illa ha instado a todos a «mantener la guardia muy alta», porque las fiestas todavía no han acabado y quedan por delante Nochevieja, Año Nuevo, la noche de Reyes y el día de Reyes, cuando también se celebrarán muchas reuniones y que muchos expertos consideran más peligrosas, ya que muchas personas que puedan haberse contagiado en Navidad podrán transmitirlo sin siquiera saber que son positivos.
En la rueda de prensa de este lunes después del Consejo Interterritorial Nacional de Salud, Illa explicado que tanto él como los consejeros autonómicos y el resto de ministros implicados en las restricciones han coincidido en agradecer a la población su comportamiento estas fiestas. El ministro ha resaltado que la población «está muy concienciada con los mensajes que hemos ido dando» y ha remarcado el «esfuerzo muy notable» que han realizado para cumplir las «medidas drásticas» durante estas fiestas y que han permitido «estabilizar la situación».
A pesar de todo, Illa ha coincidido también con el resto de ministros y consejeros en que «hay que mantener la guardia muy alta» porque «la Nochevieja nos produce una preocupación alta». El ministro cree que «hay que mandar un mensaje de muchísima prudencia y pedir que se muevan lo mínimo posible y que limiten al máximo los contactos que tienen. Tenemos que mantener la guardia muy alta en estos días que nos quedan de Navidad».
Descenso de casos y de incidencia en Navidad
Sobre los datos conocidos este lunes, en los que se ha observado un descenso de la incidencia acumulada desde los 262 casos hasta 246, Salvador Illa ha querido restarle importancia y señalar que acabamos de pasar muchos días festivos, con un fin de semana entre medias, por lo que podrían producirse «distorsiones» como las de cada fin de semana, cuando se realizan menos pruebas.
Cada lunes suelen notificarse menos contagios en 24 horas que el resto de días de la semana, y existe el temor de que esto pueda repetirse de forma más contundente esta semana, con los casos saliendo a la superficie durante los próximos días.
En la misma línea se ha pronunciado también Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), quien ha insistido en que «la interpretación de los datos no es muy sencilla» y que «son cifras menores que a principios de la semana pasada, pero el hecho de haber tenido tres días festivos no nos permite todavía muy bien interpretar esta información. Hay que esperar a los datos de los próximos días».
Será probablemente la próxima semana, antes de Reyes, cuando empiecen a conocerse los datos que realmente muestren cuál ha sido la evolución de la pandemia durante estas fiestas, ya que empezarán a notificarse los contagios producidos durante Nochebuena y Navidad y si realmente comportan un peligro de cara al mes de enero y a la posible tercera ola.