Foto de unas mascarillas quirúrgicas.

Roberto, el español fallecido por coronavirus justo cuando iba a cumplir los 30

El joven perdió la vida solo cinco días después de ser ingresado en el hospital

El coronavirus ha dejado en España, y en el mundo entero, muchas trágicas historias, especialmente de familias que han perdido a seres queridos por culpa del virus. Una de ellas es la de Roberto Teruel, un joven de solo 29 años fallecido tras contagiarse de Covid-19  en Palma de Mallorca.

El chico falleció pocos días ante de cumplir los 30 años, el pasado 19 de marzo, cuando su cumpleaños era el 2 de abril, así lo ha contado su madre al diario local 'Última hora'. Según ella misma explica, todo ocurrió deprisa, en apenas unos días, y es que el joven estaba dentro de la población de riesgo. Padecía el síndrome de Rubinstein-Taybi, con un 87% de discapacidad.

Al parecer, el joven acudía a un centro de día, y creen que allí fue donde pudo contagiarse. Fue el día 12 de marzo cuando desde el centro llamaron a la madre del chico, tras ello la mujer lo recogió y lo llevó a su doctora. En la visita la médica no le detectó nada raro, así que le recetó antibiótico para la fiebre y por si tuviera una infección, todo ello por ser grupo de riesgo.

Hasta entonces, según explica la madre del chico, Roberto no había tenido ni fiebre ni tos, pero sí que estaba algo decaído los últimos días. Justo el día después de su visita al médico le empezó la fiebre, hasta que el mismo sábado se le disparó y, además, empezó a tener dificultades respiratorias.

Ese mismo día lo ingresaron en el hospital, le hicieron la prueba del coronavirus y dio positivo. Pese a quedarse ingresado en el centro, no se pudo hacer nada para salvar la vida del joven, acabó falleciendo solo cinco días después en el mismo hospital. 

Tal y como explica su madre a 'Última hora', al dolor de la pérdida, se sumó la terrible situación en España, cosa que hizo que no le pudieran hacer al joven un velatorio y darle una despedida en condiciones normales. De hecho, según cuenta, el chico fue incinerado y fue la hermana de la mujer quien tuvo que acudir a buscarlas, ya que el resto de familia había estado en contacto con él los días anteriores y estaban en cuarentena.

Ahora el hermano de Roberto, solo un año menor que él, se ha convertido en el gran apoyo de la mujer, así como su propia hermana y, en su memoria siempre estará su hijo y e amor que se tenían, tal y como ella misma ha publicado en un mensaje recogido por 'Última hora': «Estás presente en cada silencio, en cada latido de mi corazón y en cada uno de mis pensamientos. Siempre fuiste y serás mi niño. Tarde o temprano estaremos juntos. Te quiero Rober».