España ha vivido un fin de semana negro con trece muertos en las carreteras, cinco de ellos en un mismo accidente. Uno de los fallecidos es Roberto Blanco, un hombre de 47 años y vecino de Santiago de Compostela. Su muerte ha provocado una gran tristeza en el equipo de fútbol sala Stellae de Padrón.
Todos los que conocieron a Roberto coinciden en que era una persona que siempre echaba una mano de forma desinteresada. Así fue como entró en el club Stellae FS, con la firme voluntad de ayudar sin pedir nada a cambio. Tras conocer su muerte inesperada, el club ha publicado un emotivo mensaje.
Roberto estaba divorciado y su hijo era el centro de su vida, además de su afición por el deporte. Junto al fútbol cosechaba otras pasiones como la fotografía y el pádel, donde también hizo muy buenos amigos que hoy se encuentran consternados. El domingo, Roberto perdió la vida al chocar su moto contra un coche.
El accidente en el que perdió la vida
Sucedió en el kilómetro 5,500 de la DP-0701 que une Santiago con Santa Comba, a la altura de la parroquia de Fecha. Se trata de un punto conocido como la recta de Brins, donde por razones que no han trascendido la moto de Roberto chocó contra un turismo. La noticia no tardó en difundirse, causando una gran conmoción.
En el club de fútbol sala Stellae FS, Roberto destacó por su entrega y sus ganas de ayudar. Era el fotógrafo oficial de la entidad, llevaba las redes sociales y hacía de speaker en los partidos. Siempre que había que echar una mano él estaba allí, motivo por el cual su ausencia ha dejado un enorme vacío.
“Vino con un equipo rival a un torneo que organizábamos y se ofreció a colaborar con nosotros de forma desinteresada”, recuerda el vicepresidente del club, Javier Mariño. Roberto se mostró dispuesto a colaborar “limpiando vestuarios, arreglando un banquillo, lo que hiciera falta”. Así es como entró en el club.
Mensaje del club
Roberto Blanco era vecino del barrio de Fontiñas y tenía una baja de larga duración por problemas de salud. Dedicaba todo su tiempo a su hijo y al club, que se había convertido en uno de sus motores de vida. El club le ha despedido con un sentido homenaje: "Roberto, amigo del club durante años, te echaremos de menos”.
“Triste noticia para todos”, anuncia el comunicado, “pero sobre todo para su familia a la que mandamos un fuerte abrazo”. Le recuerdan como “nuestro fotógrafo, camarógrafo, speaker, y todo lo que hiciese falta”. “Se nos va, solo deseamos que seas feliz allá donde estés”, reza el emotivo texto.
Además, anuncian que todos los equipos guardarán un minuto de silencio en honor a él, “en los partidos que juguemos el próximo fin de semana”. “Descansa en paz, amigo, tu recuerdo siempre estará presente en este club”, concluye el mensaje. El vicepresidente reconoce que “es un palo enorme” y se pone a disposición de la familia.
Aficionado al pádel
Muy vinculado a las entidades de la ciudad, el motorista fallecido también colaboró como fotógrafo con el partido Ciudadanos. Anteriormente había estado también en otro club de fútbol, el Victoria de Santiago. En sus ratos libres jugaba a pádel en el equipo del Gimnasio Squash, donde hoy sus compañeros lloran su pérdida.
De hecho, Roberto perdió la vida justo cuando volvía de jugar un partido de pádel en el Real Aero Club de Santiago. La entidad se ha sumado a las muestras de dolor con un mensaje destacando “su amabilidad, profesionalidad, educación y deportividad”. El fallecido solía retratar los torneos de tenis y pádel con su cámara.
La mujer del turismo contra el que chocó el motorista fallecido resultó herida leve. La Guardia Civil abrió una investigación sobre el accidente, que provocó largas retenciones pasadas las ocho de la tarde del domingo. En otro accidente ocurrido el fin de semana en Galicia murió Martín Rilo, un joven de 19 años.