Pocas dudas de que la desesperación tiene que ser muy grande para que unos padres abandonen y dejen solos a sus hijos muy pequeños. Y aunque quizá lo hagan con la intención de que tengan un futuro mejor, realmente se la pueden jugar si finalmente nadie los encuentra. Sobre todo si como en el caso de dos hermanos de tres meses y dos años los dejan en el borde de un río.
Por suerte, la casualidad quiso que está historia tuviera un final feliz. Pues el bebé y la niña fueron rescatados, aunque con mucha fortuna, por varios agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos. Estos, seguramente lo último que esperaban encontrar en una de sus salidas de control habituales era a dos niños tan pequeños.
El hallazgo se hizo en las orillas del Río Grande. Concretamente, en el paso por el mismo por la ciudad de Eagle Pass, en el estado de Texas. Así lo ha confirmado la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza del país norteamericano que ha dado más detalles sobre el caso.
Los agentes fronterizos que patrullaban por la zona de Eagle Pass hicieron el hallazgo de los menores por pura casualidad. Este martes estaban realizando unas tareas de inspección rutinaria en su embarcación cuando vieron algo extraño en una de las riberas del río Grande. Les llamó la atención una forma con un color especialmente llamativo.
Se tuvieron que acercar bastante para poder confirmar de que se trataba. Y es que lo que había escondido entre la maleza eran dos niños de muy corta edad. Una vez encima de ellos vieron que uno de ellos era apenas un bebé de muy pocos meses.
Aquello que les había llamado tanto la atención era el pantalón rosa y la blusa amarilla que vestía la hermana mayor. A esta la encontraron sentada entre unos juncos tratando de cuidar y proteger a su hermano pequeño. El niño estaba tumbado y en una silla portabebés con unas escasas piezas de ropa.
Una nota donde se explicaba el abandono de los niños
Como es lógico, tras encontrar a los niños, sobre el mediodía de este martes 14 de septiembre, los agentes trataron de buscar a sus padres por la zona. Estuvieron rastreando los alrededores durante algunos minutos pero finalmente no encontraron a nadie más cerca. No podían saber con exactitud quien era la persona que los había dejado expuestos a una situación tan peligrosa.
Aunque finalmente, lo que sÍ que pudieron corroborar es que los niños no se habían quedado allí por accidente y que era un abandono premeditado. Y es que debajo de la sillita encontraron una nota que explicaba los motivos del abandono. En ella se relataba que los dos niños eran dos hermanos de Honduras y que sus padres los dejaban allí para que pudieran vivir en Estados Unidos.
Los niños no requirieron atención médica
Una vez, rescatados los niños fueron atendidos por un equipo médico. Si bien es cierto, que no presentaron ningún problema de Salud. Su siguiente destino fue la estación de inmigración de Uvalde, donde se inició el proceso para su acogida.
Este último caso de abandono infantil es el último ejemplo de la situación dramática que se vive en las cercanías de la frontera de EE.UU. Se siguen dando decenas de casos de padres, principalmente de Centroamérica, que cruzan México y llegan a la frontera para dejar allí a sus hijos. En los últimos meses, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza confirma que ha tenido que atender a 590 menores abandonados por sus padres y que esperan ser acogidos.