Una camarera con mascarilla atiende a los clientes en una terraza de un bar el día en el que entra en vigor en la Comunidad de Madrid la ampliación del uso obligatorio de la mascarilla,

Las razones por las que Madrid abre sus bares mientras el resto de España los cierra

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha comparado la situación en ambas regiones

Una camarera con mascarilla atiende a los clientes en una terraza de un bar el día en el que entra en vigor en la Comunidad de Madrid la ampliación del uso obligatorio de la mascarilla,
Las razones por las que Madrid abre sus bares mientras el resto de España los cierra | EuropaPress

Madrid se ha convertido en la comunidad autónoma con una incidencia acumulada de coronavirus más baja en las últimas dos semanas en toda la península, con 'solamente' 285,52 casos por cada 100.000 habitantes, según los últimos datos de Sanidad, y únicamente las comunidades de Canarias y Baleares mantienen el virus por debajo de esos niveles. 

Hay muchas personas en España que se preguntan cómo puede ser que Madrid, que superó los 800 casos de incidencia acumulada a finales de septiembre y principios de octubre, haya logrado bajar tanto la incidencia a pesar de que en ningún momento se cerraron los bares y restaurantes, como sí ha ocurrido en muchas otras zonas. Cataluña fue la primera, aunque este lunes, 23 de noviembre, han vuelto a abrir, pero muchas otras regiones se han sumado a esta medida tras dispararse los casos a finales de octubre. 

Una de estas regiones es Andalucía, que aunque no ha cerrado los locales de restauración por completo —como sí ha pasado en Asturias, Navarra o Murcia—, ha establecido las 18.00 horas como límite de abertura para todos los negocios considerados no esenciales, entre ellos los bares y los restaurantes. Cabe destacar también que esta semana han modificado la normativa para permitir que los locales puedan abrir pasada esa hora y hasta las 21.30 horas pero solamente para el servicio de comida a domicilio.

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha salido al paso de las críticas al cierre de los comercios y ha intentado explicar por qué se ha tenido que tomar esta medida en Andalucía y otras regiones y en Madrid no. 

En primer lugar, Moreno ha aprovechado la rueda de prensa para felicitar a Isabel Díaz Ayuso, compañera de partido, por haber sabido corregir los datos del coronavirus en la Comunidad de Madrid a pesar de enfrentarse a una «campaña de desprestigio» y a las presiones de Sanidad por endurecer sus restricciones. De hecho, el Gobierno llegó a declarar un estado de alarma a la carta para la región madrileña durante dos semanas para confinar perimetralmente a nueve de sus municipios, los que presentaban incidencias más altas en aquel momento, superior a los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes. 

El presidente de la Junta ha admitido que ha contactado varias veces con su homóloga madrileña para preguntar, e incluso «copiar», algunos aspectos de la gestión que se está haciendo desde en el centro de España. Y todo cuando se ha anunciado la prórroga de la mayoría de medidas restrictivas en Andalucía hasta el próximo 10 de diciembre, después del Puente de la Constitución. 

¿Y qué diferencia hay entre Madrid y el resto de España?

Para Juanma Moreno, en esta segunda ola se han dado varias circunstancias que hacen que Madrid haya podido capear el temporal con medidas menos restrictivas que otras regiones. 

La primera de ellas es que, a diferencia de esta segunda ola, donde la transmisión se ha disparado en casi todas las regiones, aunque no en todos sitios al mismo tiempo, la primera ola afectó más intensamente a unos pocos territorios, y Madrid fue, sin duda, la región que concentró el mayor número de casos y de muertes.

Este hecho provocó, en primer lugar, que en Madrid haya un porcentaje relativamente superior de personas inmunes al virus, comparado con otras regiones donde el Covid-19 pasó más de refilón entre marzo y mayo. Además, como hubo más casos, también tuvieron que lamentarse muchas más muertes a consecuencia de la enfermedad.

Para Juanma Moreno esto fue una circunstancia que ha alterado la visión que tenían los madrileños del virus, ya que muchas más familias lo vivieron de cerca y asumieron la verdadera afectación que tenía. En Andalucía, que fue una de las zonas que mejor controló el coronavirus en la primera ola, el porcentaje de gente que vivió en primera persona la dureza de la enfermedad, y de las pérdidas que ocasiona, es menor.

Esto ha podido provocar que, en general, los ciudadanos andaluces estuviesen más relajados en las medidas de distanciamiento hasta que estalló la segunda ola. Y a eso se le suma la supuesta mayor inmunidad grupal que existe en Madrid, lo que hace que las posibilidades de transmisión del coronavirus se reduzcan.

Otro aspecto a tener en cuenta, según Moreno, es el hecho de que Madrid haya decidido confinar basándose en un sistema de zonas básicas de salud, lo que ha permitido imponer medidas más restrictivas en aquellas zonas donde el virus se transmitía con mayor rapidez y virulencia.

Todas estas circunstancias hacen que la Comunidad de Madrid haya podido prescindir de restricciones más duras a la hora de intentar controlar la segunda ola de la pandemia, y según ha explicado el presidente de la Junta, la intención del gobierno andaluz es llegar a los mismos datos que actualmente tiene Madrid, para así rebajar la tensión que sufren en este momento los hospitales de la región.