En medio de la corriente de optimismo que recorre España, ante la evolución descendiente de las cifras que diariamente ofrece el Gobierno y la preparación de las comunidades para pasar a la fase 1 de la desescalada, llega ahora un nuevo mazazao en forma de informe que recoge las previsiones del Ejército sobre el futuro de la pandemia en nuestro país, y no son nada favorables.
Según el «Informe de predicción de la epidemia a largo plazo», presentado por el Ejército de Tierra, habrá dos oleadas más de coronavirus, la segunda no será tan letal ni extensa como la primera, y ninguna vacuna ofrecerá el 100% de protección. Además, fija una fecha para el final de la pandemia: tardaremos un año y medio en alcanzar la normalidad.
Así, el Ejército se prepara para lo peor y prevé que los nuevos rebrotes del Coronavirus volverán a poner el sistema sanitario contra las cuerdas, aunque matiza y dice que no será tan mortífera, ya que «enseguida se tomarán medidas de confinamiento fuertes y habrán mejorado los medios y tratamientos». El documento circula en ámbitos militares, y está elaborado a partir de datos y modelos matemáticos.
En el estudio se analiza la evolución de la pandemia a largo plazo y augura dos rebrotes más, aunque antes de llegar a eso se producirá un descenso de los contagios en verano y el calor ralentizará la expansión. No será posible, sin embargo, hacer que desaparezca y a finales del próximo otoño habrá una segunda oleada, que se puede repetir en el invierno de 2021-2022.
El dato positivo que arroja el documento es que al existir un mayor nivel de inmunidad social por el presente brote, se dispondrá de más medios y se reaccionará más rápido, minimizando los efectos de esta segunda ola. Por eso, subraya: «A mayor número de contagiados ahora, menor capacidad de propagación en la siguiente».
En este sentido, el Ejército cree que es muy importante el estudio de seroprevalencia que ayuda al ministerio de Sanidad a saber qué fuerza tendrá la segunda ola a partir de la información sobre cuánta gente queda por infectar. También augura que para entonces habrán mejorado los medios y los tratamientos.
Sobre la vuelta a la normalidad, se hace también una previsión pesimista. Un gráfico con los sucesivos repuntes concluye que alcanzaremos la plena normalidad dentro de un año y medio, una estimación bastante más prolongada que la del Gobierno de Pedro Sánchez.
Según el informe, la ola actual acabará a finales de mayo y la curva volvería a crecer entre finales de noviembre y principios de diciembre del 2020. El pico se alcanzaría a principios de enero, para empezar a decaer hasta acabar prácticamente en plano a finales de febrero. La tercera ola será mucho más débil, y tendrá lugar a finales de 2021 y principios de 2022.