El pasado fin de semana ciudades como Madrid y Barcelona dieron el pistoletazo de salida a las fiestas navideñas con el alumbrado de sus calles. Un acontecimiento que provocó una imagen de lo más preocupante y que supone la antesala de lo que podría suceder dentro de unas semanas. Cuando aún no hemos conseguido doblegar la curva de la segunda ola, cientos de ciudadanos salieron a la calle para disfrutar de las luces y de las ofertas del Black Friday.
El objetivo de las autoridades es «salva la Navidad» pero está claro que no hemos aprendido nada de estos meses de pandemia teniendo en cuenta las grandes aglomeraciones que han tenido lugar en algunas ciudades. Comercios y terrazas se han visto abarrotados por miles de personas siendo imposible guardar la distancia de seguridad, y esto ha alarmado a los expertos y ha provocado críticas en las redes sociales.
Crece la preocupación de cara a Navidad
Viendo lo sucedido el fin de semana, las autoridades han lanzado un aviso de preocupación dónde aconseja a la población a no relajarse. El Covid-19 todavía sigue entre nosotros y, hasta que no lleguen las primeras vacunas, es de vital importancia seguir cumpliendo con las medidas de seguridad teniendo en cuenta los pocos días que quedan para el puente de la Constitución y la llegada de las celebraciones navideñas.
«Es necesario que antepongamos la precaución sanitaria a cualquier otro tipo de propósito. Regalemos seguridad a aquellos que queremos para seguir todos juntos mañana» recomendaba el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez en la comparecencia que tuvo lugar el sábado 28 de noviembre.
Del mismo modo han hecho los representantes de otras comunidades, pidiendo «responsabilidad y sentido común» a la población para evitar que tras las fiestas navideñas le produzca una tercera ola.
«Todos tenemos mucho respeto a lo que podamos pasar y hablamos de esa tercera ola, pero en nuestras manos está el poder impedirlo. Tenemos que tener un comportamiento muy responsable para tener margen de maniobra hasta Navidades y también si queremos seguir funcionando y tener cierta movilidad tras los Reyes Magos» pedía Juanma Moreno, presidente de Andalucía.
Llamamiento a la responsabilidad
«Disfrutemos de la ciudad, disfrutemos de las luces de Navidad, disfrutemos del tiempo que vivimos prenavideño, pero sobre todo mantengamos todas las precauciones» ha recomendado el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almedia advirtiendo que el virus «no está vencido ni de lejos».
Los buenos resultados que la situación epidemiológica está registrando hace pensar que la tendencia es de descenso, actualmente se sitúa en 307 por cada 100.000 habitantes, sin embargo todavía quedan días por delante y las celebraciones de Navidad podrían hacer cambiar la situación. Así lo explicaba Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias.
«Dependiendo de cómo nos portemos todos y consigamos controlar el riesgo en esas dos situaciones, en enero o febrero puede que estemos en esa situación de 50 casos por cada 100.000 habitantes» se mostraba confiado el epidemiólogo.
No estamos preparados para una tercera ola
Cuando todavía no hemos conseguido bajar de la segunda ola, el comportamiento de una parte de la ciudadanía este pasado fin de semana, ha hecho saltar las alarmas sobre la posibilidad de empezar una tercera ola de contagios antes de lo previsto. Un hecho al que no estamos preparados y que los expertos advierten.
Ricard Ferrer, presidente de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICUC), ha señalado en una entrevista para Efe que «ahora mismo una cama UCI es un recurso muy disputado». Todavía es muy alto el nivel de ocupación de camas de Unidades de Cuidados Intensivos, superior al 25%, y una tercera ola supondría un efecto devastador.
Mientras que Gobierno y comunidades autónomas siguen debatiendo un plan para Navidad, debemos ser conscientes del riesgo que corremos y evitar las aglomeraciones si queremos contar con reunirnos con toda la familia en estas fechas tan señaladas.