Pedro Sánchez sigue de vacaciones en Lanzarote, a pesar de que oficialmente finalizaban el 14 de agosto. Esta era la fecha que se había establecido para el final de las vacaciones del presidente del Gobierno. Pero este ha modificado su calendario, y su decisión ha tenido consecuencias.
Según informa OK Diario, los miembros del protocolo de seguridad del presidente están que trinan porque se quedarán sin descanso. Y es que Sánchez ha decidido alargar sus vacaciones sobre la marcha. Esto perjudica a los que se encargan de su seguridad, que ya habían planificado sus propios días de descanso.
El presidente se encuentra en el palacio de La Mareta (Lanzarote), donde suele pasar todos los veranos unos días de descanso en familia. Según los planes, tenía que pasar allí diez días, del 4 de agosto hasta el 14. Pero ha decidido alargar unas jornadas más su descanso familiar.
A su alrededor, además de su familia, tiene a los agentes de seguridad que se encargan de su protección. Su labor tenía que finalizar el sábado, pero recibieron la comunicación de que el presidente alargaba sus vacaciones. La decisión ha causado un gran malestar entre esos profesionales.
Los guardias civiles que conforman el operativo de seguridad han denunciado "el trato arbitrario y despótico" de la presidencia. Aseguran que la prolongación de las vacaciones del presidente coincide con el agotamiento de los agentes en pleno mes de agosto. Ahora, de repente, se han quedado sin vacaciones.
Turnos de trabajo y descanso
Pedro Sánchez suele visitar todos los años el palacio de La Mareta, en Lanzarote. Se trata de una residencia de la familia real española en la que el presidente del Gobierno ha pasado algunos períodos vacacionales. Ya estuvo allí el verano pasado, y también fue el destino escogido para 2021.
El presidente llegó el pasado 4 de agosto, y desde entonces los agentes al cargo de su seguridad planearon al detalle los turnos de trabajo y descanso. A última hora, antes de finalizar el período vacacional, recibieron la noticia de que Sánchez se quedaba unos días más.
Los agentes pertenecientes al Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) están desplegados en el territorio desde el 2 de agosto. Dos días antes de la llegada de Sánchez y su familia, empezaron a preparar el dispositivo de seguridad. Desde entonces, han trabajado sin descanso en su protección.
Esperaban poder descansar a partir del día 14, pero la decisión tomada a última hora ha frustrado sus planes. De momento, tendrán que quedarse allí por lo menos hasta el día 21 de agosto, pero no descartan que haya una nueva prórroga. Se quejan de la arbitrariedad de este tipo de determinaciones.
Las vacaciones del presidente
En La Mareta, Pedro Sánchez dispone de una residencia de más de 30.000 metros cuadrados con acceso directo al mar. La finca incluye diez bungalows con piscina y varias terrazas. También tiene gimnasio, pista de tenis, cancha de baloncesto y una parcela con jardín de 10.000 metros cuadrados.
El emplazamiento, que destaca por su fantástica localización geográfica y unos atardeceres de ensueño, fue un regalo del rey de Jordania al entonces rey Juan Carlos. Ya bajo el reinado del rey Felipe VI, la Casa Real donó el palacio a Patrimonio Nacional. Dentro del complejo hay incluso un lago.
Desde hace un tiempo, el palacio de La Mareta se ha convertido en el emplazamiento favorito de Pedro Sánchez para descansar. Entre sus peticiones, estuvo la de contratar un servicio de mantenimiento de la cancha de baloncesto. Además, hay un servicio integral de limpieza por importe de 90.000 euros.
Ahora, la decisión de alargar las vacaciones en el citado complejo afectará de forma colateral al descanso de otros trabajadores. En este caso, del servicio de seguridad que tendrán que quedarse una semana más en La Mareta. La polémica sigue acompañando así las vacaciones del presidente del Gobierno.