La actual pandemia causada por la Covid-19 ha supuesto un gran cambio en la vida normal de toda la sociedad, pero está notando especialmente en las grandes ciudades. En estas se ha tenido que ganar espacio en las calles, por ejemplo en la colocación actual de las terrazas o en el momento de hacer actividades, para poder mantener la distancia de seguridad y así evitar los contagios.
Ciudades como Nueva York han permitido a todo tipo de comercios, de floristerías a peluquerías, poder ocupar el espacio frente a sus escaparates o incluso plazas de aparcamiento para conseguir más espacio. Y en este sentido va el plan aprobado por unanimidad en el pleno madrileño, a iniciativa de Más Madrid, 'Madrid a la calle'.
La portavoz de la formación explicaba en 'La Vanguardia' que «si la pandemia ha cambiado nuestras vidas, cambiemos nuestras ciudades». Así la idea central es evitar el contagio por aerosoles, uno de los principales de este virus. Explica que ha de ser una apuesta y una inversión de los gobiernos «para frenar los contagios, ganar en salud y reactivar la actividad económica».
Una de las principales medidas es una de las que ya se han venido aplicando en los últimos meses: que los bares y restaurante puedan ampliar sus terrazas aunque sea a costa de reducir las plazas de aparcamiento en la ciudad.
Junto a esta, también se quiere hacer una apuesta para que otros negocios puedan salir a la calle, ocupando en este caso parte de la acera. Hasta ahora este tipo de actuaciones son prácticamente escasas salvo la celebración, por ejemplo de la Feria de Libro o el conocido Mercado de las Ranas, donde los comerciantes del barrio de las Letras sacan su oferta a la calle cada primer sábado de mes.
Pero no solo se trata de un impulso de la actividad privada en las calles de Madrid. También se quieren incrementar las actividades ocio en parques y zonas verdes y abrir más zonas de juego infantiles. A su vez, se quiere aumentar el uso de todo tipo de espacios abiertos, zonas deportivas o jardines municipales para actividades culturales o exposiciones. Y se anima a los centros educativos a solicitar realizar actividades escolares o extraescolares en espacios públicos, siempre que sea técnicamente posible.
La vicealcaldesa Begoña Villacís también explicaba a 'La Vanguardia' que el consistorio quiere conseguir una «dinamización del espacio público y de las actividades al aire libre para participación de la ciudadanía» ahora que por la pandemia «el uso del espacio público debe ser un elemento clave».
Villacís recordaba que durante estos meses se han realizado medidas como peatonalizar muchas calles o mantener abiertos parques y jardines. Ahora trabajan para conseguir un marco legislativo que permita «determinadas ocupaciones del espacio público que contribuyan a la reactivación económica».
La comunidad da su apoyo al sector hostelero
Mientras la capital prepara este ambicioso plan, desde el gobierno de la Comunidad han vuelto a dar su apoyo a uno de los sectores más afectados por la pandemia: la restauración y la hostelería. La presidenta Isabel Díaz Ayuso ha vuelto a recalcar que totalmente necesario que es importante que este tipo de negocios, en los que muchos son familiares, no se cierren «nunca».
Ha dejado claro para el gobierno madrileño ahora mismo esa es una medida «impensable» sabiendo que hay «alternativas» aunque impliquen abrir «a medio gas». Para Díaz Ayuso todo pasa por buscar «fórmulas creativas». Y en la línea del plan del ayuntamiento la principal apuesta es trasladar todo «al aire libre», evitando los sitios cerrados donde se producen muchos más contagios. Insiste en que la actividad se puede mantener con todas la precauciones y que mejor que hacerlo «en la calle en lugares abiertos».