La situación de pandemia a causa del covid-19 lleva marcando nuestras vidas desde marzo del año 2020. Casi un año y medio más tarde, en España y en todo el mundo nos hemos acostumbrado a las medidas restrictivas. Todo el mundo conoce, también, cuál es el protocolo que debemos seguir si nos contagiamos e incluso si somos contacto estrecho de un positivo.
Pero siempre hay situaciones que nos obligan a ponernos las manos en la cabeza. Y no hace falta ir demasiado lejos para encontrarnos con circunstancias absolutamente escandalosas, protagonizados por personas que ponen en riesgo la salud de todos. Este miércoles, 21 de julio, ha transcendido a los medios de comunicación lo que ocurrió hace tan solo unos días en un restaurante de la ciudad de Alicante.
Un restaurante de Alicante con varios empleados trabajando siendo positivos de covid-19
Situémonos en primer lugar en la noche del pasado viernes, 16 de julio, en un restaurante del centro de Alicante. Eran alrededor de las 20:00 cuando la Policía Local de la ciudad se desplazó a este establecimiento por un aviso que les advertía de que allí se encontraba una empleada contagiada. Se trataba, concretamente, de la cocinera del local, de quien se corroboró que días antes había dado positivo por covid-19.
Al confirmarse esto, la Policía Local de Alicante procedió a desalojar el restaurante y a clausurarlo hasta el domingo siguiente, 18 de julio. Los agentes identificaron a un total de 14 trabajadores y 21 clientes y les obligaron a irse a sus domicilios. Pero tras esta actuación y la identificación de los individuos que estaban en el interior del local, la Policía alicantina hizo varias comprobaciones.
De entrada, el sábado, se cruzaron los datos con los que tenía la Conselleria de Salut de la Generalitat Valenciana. En la lista de presentes el viernes aparecían seis trabajadores incluida la cocinera que, días atrás, habían dado positivo por covid-19 en una jornada informativa en la empresa. El resto de empleados contagiados ya no habían acudido, a trabajar, pero un total de seis estaban en su puesto de trabajo el viernes.
Al saberse esto, el mismo sábado se desplazaron a este restaurante para comprobar que estuviera cerrado. La Policía Local alicantina comprobó que, efectivamente, el local seguía sus órdenes y mantenía el establecimiento cerrado. El domingo, finalmente, se produjo la reapertura del restaurante al comprobar que no había más infectados y con los positivos en sus casas.
Multas al restaurante de Alicante por trabajar con empleados positivos de covid-19
En un comunicado hecho público esta semana, el Ayuntamiento de Alicante lamentó públicamente los hechos. "Tanto el responsable como la trabajadora se enfrentan a sanciones muy graves por incumplir las medidas sanitarias adoptadas por la Generalitat Valenciana para frenar la pandemia", aseguró el consistorio. Según la legislación de la Comunidad Valenciana, las sanciones seran de 30 001 a 60 000 euros, pero si hay reincidencia podría ascender hasta 600 000 euros.
Se trata, como han podido comprobar, de un caso de incumplimiento grave de la normativa covid, con el peligro que suponen las posibles infecciones a clientes del establecimiento. El concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Alicante, José Ramón González, ha querido poner en contexto este incidente. Según González, este es un caso "muy aislado" ya que se trata de "el primer que se da en nuestra ciudad".
Tras esta cuestión, ha exigido "máximo cumplimiento y control en los establecimientos de todos sus trabajadores". El concejal también ha subrayado que "la Policía Local va a ser muy estricta para evitar que se pueda llevar a cabo algún brote de covid-19 en Alicante". Un episodio, pues, absolutamente lamentable el vivido el pasado viernes en la capital alicantina.