A medida que pasan los días, la búsqueda de los cuerpos de Tomás Gimeno y su hija Anna parece más infructuosa. El buque que sigue buscando los cuerpos en el fondo del mar tendrá que volver pronto a tierra y a otras tareas. Y si eso ocurre, encontrar los cuerpos será prácticamente misión imposible.
Beatriz Zimmermann, la madre de las niñas, es la persona más interesada en que los cuerpos aparezcan. Primero, para descansar y poder enterrar a sus dos hijas y que estén juntas. Y luego para descansar ella misma, eliminando cualquier duda sobre la posibilidad de que Anna siga viva.
Por no hablar de Tomás, el verdugo que le ha quitado a las dos personas que más quería en este mundo. Si su cuerpo no aparece, el miedo a que consiguiese huir seguirá ahí durante toda su vida.
Por ese motivo, la madre ha lanzado una petición a los españoles a través de las redes sociales. Beatriz se ha comunicado varias veces a través de estas plataformas, y no ha dudado en volver a hacerlo.
La madre de las niñas ha recordado hace tiempo pidió poner una vela blanca para iluminar el camino de vuelta a sus hijas. Poco después, el cadáver de Olivia fue encontrado en el fondo del mar. A causa de su faceta más espiritual, Beatriz entiende eso como una señal, como un milagro que quiere repetir.
Por esa razón, ha pedido «inundar las redes de velas blancas» para no perder la esperanza de que aparezca Anna. Beatriz quiere despedirse de las dos niñas a la vez y que ellas estén juntas allá donde vayan. «Cerrar el círculo y encontrar paz», explica en su comunicado.
Cuando pedimos poner una vela blanca para que su luz iluminara el camino de vuelta a casa de las pequeñas, apareció Olivia... Como un milagro, con una señal de la que estaremos siempre agradecidos.
Hoy, de nuevo les pedimos colaboración, no queremos perder la esperanza y rezamos cada día porque aparezca Anna. Para poder despedirnos de ella junto a su hermana y. sobre todo, que aparezca Tomás.
Para que Beatriz pueda descansar. Cerrar el círculo y encontrar paz.
Inundemos las redes de velas blancas. Por Anna y por Beatriz que junto a Olivia estarán #siemprejuntas.
El tiempo para la búsqueda del Álvarez Alvariño se agota
Por desgracia, el tiempo para encontrar los cuerpos de Anna y de Tomás se está acabando. El buque Álvarez Alvariño no encuentra nuevas pistas que puedan reconducir la búsqueda, y pronto tendrá que volver a puerto. Le esperan otras tareas, sus trabajos habituales, que han sido retrasados para ayudar en el caso de las niñas.
Según ha informado Salvamento Marítimo y ha recogido Cadena COPE en Canarias, no hay alternativa eficaz para seguir con la búsqueda. De momento no hay una fecha concreta para que el buque abandone la isla, pero la Guardia Civil ya trabaja en otras vías.
La principal alternativa al buque es un pequeño submarino con capacidad de bajar a una profundidad de hasta 2.180 metros. El problema es que es de propiedad privada y su uso supondría un fuerte desembolso para las arcas públicas.
Los investigadores están haciendo todo lo posible por hallar los cuerpos, especialmente el de Tomás. El de Anna también quieren encontrarlo para darle paz a su madre, pero admiten que es complicado. Si su cuerpo se salió de la bolsa de deporte, podría estar en cualquier parte.
El de Tomás, en cambio, si se lastró con el cinturón de plomo como creen, podría seguir ahí abajo. Si no se encuentra el cuerpo, el caso no podrá cerrarse hasta dentro de 20 años y Beatriz no podrá descansar.
Es más, según ha explicado el portavoz de la familia, aunque la madre cree que Tomás se suicidó, siempre tendría miedo. Miedo a que huyese del lugar de los hechos y vuelva algún día para acabar lo que empezó. Miedo de que se llevase también a Anna y no esté realmente muerta.
Creen al 99% que ambos están muertos, pero sin una certeza, siempre quedarán especulaciones sobre la realidad.