Patricia Ramírez, la madre de Gabriel Cruz, el pequeño asesinado a manos de la pareja de su padre Ana Julia Quezada, ha convocado una rueda de prensa hoy a las 12 del mediodía para denunciar unos hechos «de mucha gravedad». Se trata de información que tiene la familia y que quieren dar a conocer en público.
Hay que recordar que la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo confirmó el pasado 16 de diciembre la condena a prisión permanente revisable dictada contra Ana Julia Quezada. Se la considera culpable del asesinato de Gabriel Cruz, «El Pescaíto».
Gabriel, de ocho años de edad, murió a manos de Ana Julia en febrero de 2018, en una finca de Rodalquilar, en Níjar (Almería). Los jueces descartaron los recursos interpuestos por los abogados de Ana Julia, y ratificaron la condena inicial de prisión permanente revisable, dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
[predef]espaadiario-631[/predef]
Ana Julia cumple condena por el asesinato del menor. Inicialmente se le impuso otra condena por lesiones psíquicas contra los padres, pero finalmente fue absuelta de este segundo delito. El caso generó un gran revuelo y conmocionó a la opinión pública en España, que se solidarizó con los padres y la familia de Gabriel.
Patricia Ramírez, la madre de Gabril, ejerció la acusación particular y recurrió la decisión del Tribunal Supremo al considerar poco razonada su decisión de absolver a Ana Julia del delito de ensañamiento. La madre considera que la magistrada-presidente de la sala entró en valoraciones de opinión tanto en lo referente al ensañamiento como al resultado de la prueba pericial al dar instrucciones a los jurados.
Ante la revisión del caso que hizo el Tribunal Supremo en diciembre de 2020, la madre del pequeño Gabriel se mostró «con miedo a que no se haga justicia con él». Sobre Ana Julia recayó la máxima pena que contempla el código penal español, la prisión permanente, pero absolvió a la acusada del ensañamiento, y esto es algo muy importante para los padres.
Para la madre del niño, no se trata de una cuestión de años sino de justicia: «La condena de prisión permanente revisable es la máxima que tenemos, pero la justicia es la verdad». Patricia sigue manteniendo que el crimen de su hijo «no fue un arrechuchón», y prometió llegar hasta el final «en honor a un menor, y a todo lo que tuvo que pasar».
Para la madre de Gabriel, «es importante que la sentencia recoja lo que allí pasó y que se ha dicho por especialistas». Considera que la sentencia dictada por la juez, y confirmada por el Supremo, está basada en la opinión de la magistrada y no en los hechos constatados y por esto, dicen, está dispuesta a llegar hasta el final.
En su lucha para que se reconozca todo lo que le sucedió a su hijo, Patricia ha convocado hoy una rueda de prensa. Asegura tener información relevante sobre el caso de Gabriel, y que tiene que difundirla «debido a su gravedad». La familia espera que esto pueda dar un vuelco definitivo a la decisión de los magistrados.
12 de días de dolor
Patricia Ramírez pidió a los jueces que reconocieran las lesiones psíquicas infligidas por Ana Julia a los padres al cometer el crimen y esconder el cadáver durante 12 días. En este sentido, recordó a todas las personas «que en el afán de encontrar a mi pequeño trabajaron duro, doblando turnos, sin dormir, con lluvia o sin ella, para que pudiese hacerse justicia».
Patricia se acordó de los numerosos clubes de corredores, de montaña, de senderistas y de espeleólogos que buscaron a Gabriel, incluidos Protección Civil de muchas provincias, policías, bomberos y voluntarios de todos los lugares.
Todos buscaron a Gabriel durante 12 días que sumió a la familia de Gabriel «en la más terrible de las situaciones que pueda pasar nadie». Por eso, pidieron la revisión de la absolución de Ana Julia por un delito contra la integridad moral de los padre, mientras que la defensa pidió la absolución por el delito de asesinato.
Los abogados de los padres de Gabriel piden que se repita el juicio y se tengan en cuenta las pruebas que avalan el ensañamiento. Esto incluye a los testimonios e informes presentados por la acusación basándose en las pruebas de imagen, informes forenses y científicos de la Guardia Civil, la reconstrucción de hechos y las declaraciones de los forenses. Así esperan que «se haga justicia en su memoria».
Los hechos probados
Gabriel Cruz desapareció el 27 de febrero de 2018. En el dispositivo de búsqueda del niño participó activamente, como voluntaria, la entonces pareja de su padre, Ana Julia Quezada. El 11 de marzo, la policía interceptó el coche de Ana Julia, y descubrió el cadáver del pequeño en el maletero. La autora confesa reconoció haber desenterrado el cuerpo del niño al sentirse cercada por la investigación.
La sentencia considera probado que Ana Julia mató a Gabriel en la finca propiedad de la familia paterna, el mismo día de la desaparición. Luego participó en las tareas de búsqueda y, en un momento en el que se sintió bajo sospecha, decidió desenterrar el cuerpo y llevarlo a su vivienda de La Puebla de Vícar, donde fue detenida. Dos días después se derrumbó y lo confesó todo.