España sigue conmocionada. Pues justo hoy se cumple una semana desde que un juzgado ordenara el internamiento del joven del 15 años que asesinó brutalmente a toda su familia en Elche. Mató a sus padres y su hermano de 10 años con una escopeta.
El chico fue castigado por sus malas notas y no se lo pensó dos veces. Santi mató a sus padres y a su hermano pequeño con una escopeta y escondió los cuerpos en el cobertizo. Al pequeño lo asesinó por la espalda, cuando trataba de huir. Convivió tres días con ellos, jugando a la videoconsola y respondiendo a los whatsapp que recibía su madre. Finalmente confesó los hechos a una vecina.
Ahora, pero, una nueva información ha salido a la luz. Pues la pena máxima que podría cumplir el joven es la siguiente: hasta cinco años internamiento en régimen cerrado y tres años de libertad vigilada. Una pena polémica, a todas luces.
Para que esto pasara, el juzgado de Menores debería condenarlo. Cosa que todavía no ha ocurrido.
Una medida controvertida
Es lo que recoge la 'Información.es'. Pues según ellos, así lo dicta la Ley del Menor. Y es que si una persona con 18 años hubiera cometido estos mismos crímenes, la pena a imponer sería la prisión permanente revisable.
El parricida de Elche, pero, es menor de edad, por lo que la ley varía y no contempla la prisión permanente. En su caso, a los 21 años estaría en libertad y totalmente libre de antecedentes penales.
La ley dicta que no se añadirán antecedentes para facilitar su reinserción social.
Así las cosas, lo máximo que podría cumplir el parricida de Elche sería una pena de cinco años. Está a punto de cumplir los 16, por lo que estaría un total de cinco años internamiento en régimen cerrado.
Finalmente, cuando cumpliera los 21, se le vigilaría durante 3 años. Si los cumpliera con 'normalidad' se le quitarían los antecedentes penales, con la voluntad de colaborar a su reinserción social.