La inmunidad de grupo, o sea, las personas que tienen anticuerpos resistentes al Coronavirus, es uno de los factores claves para dejar atrás las medidas de confinamiento en países con altas tasas de contagio como España. A la espera de que empiecen las pruebas en nuestro país, la OMS advierte de unos primeros resultados muy desalentadores.
España es uno de los países que en los próximos días pondrá en marcha las pruebas de seroprevalencia para ver cuántas personas son inmunes a la enfermedad, un dato clave para prevenir nuevos contagios y evitar rebrotes. El Gobierno lo anunció a principios de abril pero las pruebas se han retrasado dos semanas y empezarán el 27 de abril.
En concreto, se prevé examinar a 62.000 personas en varias tandas, dejando algunas semanas de diferencia para saber, al cabo de ocho semanas, cuántas personas que han superado la enfermedad desarrollan anticuerpos. Esto es clave para empezar a salir del confinamiento sin caer en el riesgo de una segunda oleada de contagios.
Pero las primeras pruebas de seroprevalencia que ha realizado la Organización Mundial de la Salud ofrecen resultados desalentadores porque muestran menos inmunidad de la que se esperaba. Dicho de otro modo, según las primeras pruebas de la OMS, han superado la enfermedad pero siguen sin ser inmunes más personas de lo que se esperaba.
Según el director general de la OMS, Tedros Adhanom, «los datos iniciales de algunos de estos estudios sugieren que un porcentaje relativamente pequeño de la población puede haber sido infectada incluso en áreas muy afectadas, no más del 2% al 3%».
La disminución de la inmunidad respecto a lo que se esperaba dependería de la bajada de infectados reales respecto de las previsiones, según este organismo. En países donde ya se han hecho las pruebas, como los Países Bajos, el 3% de la población ha dado positivo en los anticuerpos contra el Coronavirus.
La baja inmunidad podría deberse a la poca efectividad de las pruebas, pero también podría ser que no todas las personas desarrollen la misma inmunidad ante la enfermedad, y aquellos casos más graves tenderían a desarrollar más anticuerpos que los que la pasen solo con síntomas leves. También está por ver que la inmunidad sea sinónimo de resistencia completa.
En España, los expertos no auguran un gran porcentaje de población inmune. Varios estudios matemáticos han previsto una tasa de entre 10% y 15% de la población, lo que queda a años luz del 60% de inmunidad de grupo recomendado para empezar el desconfinamiento.
¿Puede ser este dato un freno para dejar atrás el confinamiento? El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, lo pone en duda y anuncia que este será solo uno de los factores que se tendrán en cuenta para ir orientando las medidas de desescalada: «El porcentaje que nos dará no es tan alto como para ser un valor único».