Mientras Rusia y Ucrania tratan de ponerse de acuerdo para un alto el fuego, los ucranianos siguen defendiendo su país con uñas y dientes. La resistencia heroica frente a la invasión rusa está siendo posible gracias a la participación de miles de voluntarios. Entre todos ellos destaca el nombre de Olga Semidyanova.
Antes de la guerra, Olga fue reconocida con el Premio Madre-Heroína por dar a luz a seis hijos y adoptar a otros seis de un orfanato. Tras estallar la guerra de Donbass se alistó como voluntaria y partió al frente como médica militar. El pasado 3 de marzo murió en el curso de una ofensiva enemiga.
Su coraje, heroísmo y profesionalidad le habían valido varios premios, entre los cuales la Orden de Honor y Gloria. Aunque llegó la orden de que las mujeres se alejaran del frente, Olga decidió permanecer hasta el final al lado de sus compañeros. Hoy homenajean su figura entre lágrimas.
Se alistó como voluntaria
Olga Semidyanova solía mostrar con orgullo los reconocimientos que había acumulado a lo largo de su carrera. Cuando estalló la guerra en Donbass sintió la responsabilidad de defender a su país, y se alistó como voluntaria. Ella y su esposo partieron hacia el frente, y los hijos mayores siguieron el mismo camino.
Olga participó en una de las cruentas batallas por la defensa de las principales ciudades del este de Ucrania. En una de ellas, el comandante dio la orden a las mujeres para que abandonaran el frente. Ella decidió quedarse y seguir salvando a los combatientes ucranianos como médico militar.
Olga participaba en la guerra como médico, atendiendo y transportando a los heridos con un chaleco antibalas y un casco militar. Sin embargo, las protecciones no lograron evitar que muriera tras recibir un balazo en el abdomen. Fue el pasado 3 de marzo, y acabó muriendo al perder mucha sangre.
Ejemplo de amor por su tierra
Su hija Yulia Volkova ha ensalzado la figura de su madre en Ukrainenews: “Casi nunca dejaba los puntos críticos porque quería ayudar a la gente, aunque la guerra se llevó a muchos de sus amigos”. “Nuestra madre merece ser recordada”, ha añadido, “que se escriba sobre ella”.
Según Volkova, su madre Olga “merece ser recordada por las muchas cosas que ha hecho, por las lágrimas derramadas, por las sonrisas que ha dado”. Cree que su ejemplo tiene que servir “para seguir luchando, y recordar que la guerra aún no ha terminado”. Los combates han impedido que puedan enterrarla.
Olga Semidyanova se ha convertido en “un ejemplo de patriotismo y amor por su tierra”. Su ejemplo ha contagiado al hermano mayor, que también partió al frente de guerra y se halla en la defensa territorial. Otra hija también se alistó como voluntaria, y el hermano menor se encuentra en la defensa de Járkov.
Heroína nacional
Por su lado, el marido de Olga sirve en la defensa territorial aunque es psicólogo y no tiene formación militar. “Es muy difícil para él”, cuenta Yulia, “y trata de mantenernos en forma y mantener la calma”. Su único consuelo ahora es que su hermano mayor tendrá una hija, aunque ya no podrá conocer a su abuela.
Olga tenía 48 años y llevaba ocho participando con las fuerzas regulares ucranianas en la guerra de Donbass. Había acumulado una gran experiencia militar, que puso al servicio de su pueblo con el inicio de la invasión el pasado 24 de febrero. El 3 de marzo murió en el ataque mortal, cerca de Donetsk.
Poco se sabe de su vida, excepto que vivía en Marhanets, a unos 150 kilómetros de donde murió. “Fue asesinada en una confrontación con los criminales rusos”, declaró el asesor del ministerio del Interior, Anton Geraschenko. “Aun sabiendo que su regimiento no iba a sobrevivir, decidió proteger a su país hasta el final, es una heroína nacional”.