Una madre sujeta la mano de su hijo en un hospital

JJ, el niño de 9 años que ha fallecido horas después de dar positivo de Covid-19

El coronavirus se ha cobrado otra víctima infantil. Un menor estadounidense de 9 años recién cumplidos ha fallecido horas después de conocer el resultado de su pcr.

El coronavirus sigue dejando historias desoladoras por donde camina. Hay pacientes que pasan el periodo vírico sin darse cuenta, como es el caso de los asintomáticos, pero hay otros pacientes para quienes la realidad del virus es notable, dolorosa y grave. 

Desde los inicios de la pandemia hasta ahora, han sido muchas las vidas que el Covid se ha cobrado a su paso. En un principio, se creía la falsa hipótesis de que el coronavirus solo se ensañaba con las personas más longevas de la sociedad; los abuelos y las abuelas. 

Aunque, por aquel entonces también se ponía el foco de personas de riesgo en aquellos pacientes que presentaban algún tipo de patología crónica. 

En cambio, en el último periodo del coronavirus, los expertos se han dado cuenta de que el virus no entiende de edades ni de enfermedades. Ataca por igual a ancianos, personas de mediana edad, niños y bebés; sanos o enfermos; fuertes o indefensos. 

Los sanitarios alertan de que las camas de los hospitales de las plantas de pediatría tampoco están vacías. Muchos pacientes infantiles de los hospitales presentan un cuadro de coronavirus

El coronavirus es agresivo tanto para mayores como para los niños y las niñas, a pesar de que el sistema inmunológico de los pequeños de la casa es más fuerte que el de los ancianos. Un porcentaje significativo de menores han perdido la vida en los centros sanitarios a causa del virus. 

Una historia de tantas

JJ Boatman, un niño de 9 años natural de Texas, en Estados Unidos, es otra de las historias que resquebraja los corazones, más aún el de su familia. 

Son muchos los sucesos que se dan a conocer de menores que fallecieron a colación del coronavirus a lo largo de todo el mundo. Este niño estadounidense es otro de ellos. 

JJ Boatman falleció tan solo unas horas después de que su familia recibiera la noticia de que el menor de 9 años había dado positivo en la prueba de detección de Covid-19. Los medios de comunicación locales hicieron correr esta trágica noticia. 

El niño había sido ingresado en el centro médico estadounidense Cook Children’s Medical Center, ubicado en la ciudad de Fort Worth, Texas. El menor presentaba un cuadro de dificultades respiratorias. El desenlace fatal llegó el pasado 26 de enero, cuando el niño perdió la vida.  

El padre de JJ Boarman informó a los medios de comunicación que la enfermedad había avanzado de manera muy rápida. Tan solo el día previo al fallecimiento del menor, JJ Boatman había presentado síntomas propios del Sars-Cov-2. 

El niño manifestó los primeros síntomas el día antes de fallecer 

El padre del menor escuchó a su hijo jadear. Pero como el menor había padecido la enfermedad de Crup, una infección de carácter vírico muy común en las personas de la edad del niño.

Esta afección provoca que las vías respiratorias se inflamen por lo que el paciente también manifiesta tos seca, fiebre y complicaciones para respirar. Desgraciadamente, fue el mismo episodio sintomatológico que presentan los enfermos contagiados de Covid. 

El progenitor de JJ Boatman no pensó en que su hijo tuviera coronavirus. El padre se fue a trabajar. Pasadas unas horas, la madre del menor alertó a su marido de que el pequeño demandaba auxilio porque era incapaz de respirar bien. 

Rápidamente, el menor fue trasladado a urgencias del complejo asistencial de Fort Worth. Los sanitarios le realizaron una serie de pruebas: entre ellas, unas placas de tórax. 

La radiografía evidenció que el Covid-19 había provocado en el menor un gran daño pulmonar. Horas después, la familia de JJ Boatman descubría el resultado de la pcr: el menor había dado positivo en Covid. 

El trágico desenlace llegó al día siguiente. El 26 de enero el menor perdía la vida con tan solo 9 años recién cumplidos y que, recientemente, había celebrado. 

El padre del menor fallecido, que también padece asma y trastorno por déficit de atención con hiperactividad y autismo, lanzó unas palabras a la sociedad tras conocer la triste noticia. 

«Traten de apreciar realmente lo que tiene. Sé que todo el mundo lo hace, pero realmente tómenlo en serio porque se lo pueden quitar en siete u ocho horas», dijo compungido.

La familia recauda dinero para los costes fúnebres

Los padres de JJ Boatman se vieron en la tesitura de crear una cuenta en la plataforma GoFundme para poder asumir los costes del funeral de su hijo. Por ahora, la familia ha logrado recaudar 23 mil 876 dólares. 

Los donantes han trasladado sus condolencias a la familia. Esta ha recibido las palabras y la ayuda de quienes les están apoyando económicamente en estos momentos tan difíciles con mucha gratitud.