Qué sucedió para que cinco miembros de una misma familia se precipitaran al vacío desde el séptimo piso de un edificio. Esta es la pregunta que se hacen las autoridades suizas a raíz del suceso que ha conmocionado al país. Presuntamente saltaron junto al vacío, y de los cinco sólo sobrevivió uno.
Un adolescente de 15 años es el único superviviente de esta tragedia, aunque sigue en el hospital con pronóstico grave. El resto de la familia ha fallecido en un suceso que tiene a la opinión pública conmocionada y a las autoridades descolocadas. Ahora intentan averiguar qué se esconde detrás.
El presunto suicidio colectivo tuvo lugar ayer por la mañana en un complejo turístico de Montreaux, en Suiza. La policía confirmó que se trata de ciudadanos franceses y que todos ellos pertenecen al mismo núcleo familiar. La policía tenía una orden judicial por la educación de uno de los niños.
Un matrimonio, dos hijos y una tía
Los servicios de emergencia recibieron un aviso por la caída de varias personas desde lo alto de un edificio en Montreaux. De las cinco personas accidentadas, cuatro habían perdido la vida y uno había sobrevivido aunque estaba grave. La investigación descubrió que se trataba de miembros de una misma familia.
Los fallecidos son un hombre de 40 años, su mujer de 41, su hija de 8 y la hermana gemela de la madre. El matrimonio se había precipitado al vacío con sus dos hijos de 8 y 15 años y la tía de los niños. Las primeras informaciones apuntan a que los cinco saltaron juntos desde el balcón del edificio.
El hecho ocurrió a las seis de la mañana del jueves, en un complejo turístico al lado de un casino. Un viandante se topó con tres cuerpos uno al lado del otro y, aún en estado de shock, dio el aviso a las autoridades. “Pensé que era una película de terror, no pude mirar la imagen más de unos segundos”, relató.
Tenían una orden judicial
La policía confirmó que las cinco personas parecían haberse arrojado al vacío desde el séptimo piso de un apartamento. Cuatro de ellos impactaron mortalmente contra el asfalto y fueron encontrados por transeúntes. Un quinto, el adolescente, se encuentra hospitalizado con heridas de mucha gravedad.
La policía también confirmó que no había más personas en el apartamento a parte de ellos, y no hay que lamentar más heridos. Los agentes habían acudido al apartamento con una orden de detención emitida contra los padres de los menores. Se trataba de una denuncia “en relación con la educación de un niño”.
Los policías llamaron a la puerta y alguien preguntó quién estaba ahí, pero entonces solo escucharon silencio. Al no poder contactar con los inquilinos ni acceder al interior se fueron de allí con la intención de volver más tarde. Fue entonces cuando se produjo la llamada de una persona que pasaba por allí.
Llevaban una vida discreta
La primera hipótesis apunta a que los padres instigaron a los menores a saltar del edificio junto con ellos, en una especie de suicidio colectivo. Los vecinos explican que la familia se mudó allí hace tres años y que llevaban una vida discreta. Los agentes investigan ahora el historial de los padres para esclarecer los hechos.
La policía y los equipos de emergencia acordonaron la zona y levantaron tiendas blancas en el lugar de la tragedia. Hasta el lugar se desplazaron investigadores forenses que trabajaron tanto en el piso de los inquilinos como en el lugar donde estaban los cadáveres. La fiscalía ha iniciado una investigación sobre lo sucedido.
La publicación local Blick informa que en el cantón de Vaud, donde se encuentra Montreaux, se hacen inspecciones regulares de educación. La escuela realiza un control una vez al año para ver si se cumplían las pautas de enseñanza. Sin embargo, sigue sin estar claro por qué las víctimas tomaron una decisión tan drástica.