Foto de Thomas Anthony Mansfield

Muere a los 29 años por una sobredosis de cafeína: 'cinco veces más'

El entrenador personal murió al adulterar la dosis recomendada de un batido de proteínas

La obsesión por el físico y el deporte puede llevar a situaciones dramáticas como la que se acaba de vivir en Gales, Reino Unido. Allí, un entrenador personal de 29 años ha muerto al consumir una dosis de cafeína cinco veces superior a la normal. Como resultado de la ingesta sufrió un ataque al corazón.

El protagonista de la historia es Thomas Anthony Mansfield, un deportista de 29 años que sufrió un ataque justo antes de iniciar una actividad. Los médicos confirmaron que había ingerido cinco veces más cafeína de la recomendable. Un cóctel mortal que hizo que se desplomara en el sofá.

La trágica noticia ha llevado a los expertos a advertir sobre este tipo de prácticas en el ámbito deportivo. Y es que el fallecido consumió la dosis mortal en un batido de proteínas que se consume como suplemento. Recomiendan consumir este tipo de productos de forma moderada y siempre bajo supervisión.

El envase indicaba la cantidad 

El joven entrenador personal Thomas Anthony Mansfield tomó un batido de proteínas que él mismo había adulterado. La bebida es un producto comercializado por una compañía de suplementos deportivos. En el envase se indica la cantidad diaria recomendada: entre 60 y 300 mg, es decir, dos ingestas diarias.

Foto de la pareja
Thomas y Suzannah, la pareja rota por la tragedia | Cedida

Sin embargo, este joven deportista decidió por cuenta propia añadir dos gramos a la bebida para obtener más energía. Se trata de una cantidad cinco veces superior a la indicada en el envase, y la sobredosis acabó resultando mortal. Antes de iniciar su rutina de ejercicios diarios, se desplomó en el sofá.

Thomas sintió un fuerte dolor en el pecho tras ingerir la bebida y empezó a echar espuma por la boca. Fue trasladado al hospital con el pulso acelerado, y aunque hicieron todo lo posible por salvarle la vida solo pudieron certificar su muerte. Los resultados de la autopsia revelaron el origen del suceso.

Sobredosis de cafeína

El análisis forense señaló que tenía 392 mg de cafeína por litro de sangre en su cuerpo, cuando se necesitan apenas 78 para sufrir los efectos tóxicos. Los resultados no dejan lugar a dudas: la imprudencia de este entrenador le condujo a la muerte. Y es que la cantidad de cafeína que llevaba dentro era incompatible con la vida.

La cantidad de cafeína que Thomas consumió equivalente a cien tazas de café en polvo. La duda estaba en si había sido un error de cálculo, o lo hizo expresamente para potenciar el valor de la energía. Sin embargo, los expertos consideran poco probable que se equivocara de tanto, hasta cinco veces más.

Mansfield trabajaba como guardia de seguridad y entrenador personal, y tomaba de forma regular este tipo de complementos. Se trata de productos que ayudan a perfeccionar la musculatura y aumentar la capacidad del esfuerzo físico. Conocía bien las medidas, así que es poco probable que fuera un error.

Montaje con fotos de Thomas Anthony Mansfield
Thomas era guardia de seguridad y entrenador personal | La Noticia Digital

Aunque también es poco probable que intentara superar la cantidad recomendada de una forma tan abismal. Así que la principal hipótesis es que intentó aumentar un poco la dosis y se le fue la mano. Su mujer Suzannah declaró ante la policía que su marido estaba sano y no tomaba más de dos cafés diarios. 

Taquicardia alarmante

Según relata la mujer, su marido dio un sorbo a la bebida y luego se tomó todo el vaso. De repente se agarró el pecho con las manos y cayó rendido en el sofá, con síntomas de estar padeciendo un ataque. Al ver que sacaba espuma por la boca corrió a avisar a los vecinos pidiendo ayuda.

La ambulancia llegó en pocos minutos y pudieron reanimarle con un desfibrilador, aunque presentaba una taquicardia alarmante. El hombre llegó con vida pero en estado crítico al Ysbyty Clwyd Hospital, donde murió por un fallo cardíaco. Los resultados toxicológicos confirmaron la ingesta abusiva. 

La policía cerró el caso considerando la muerte como una causa accidental por consumo indebido de cafeína. La compañía ha empezado a comercializar el producto con una cuchara y una hoja de instrucciones en los nuevos paquetes. Quieren evitar así que se repita una nueva tragedia.