Hace un año que la vida de Víctor Nuño se apagó para siempre con solo 18 años. Sucedió de la forma más inesperada, y desde entonces su familia lucha para hacer justicia. Esta es la historia que se esconde detrás, y que ahora conocemos gracias a la difusión de su madre Noelia a través de Twitter.
“Hola, mi nombre es Noelia Salvador, no tengo apenas seguidores en Twitter y estoy buscando el apoyo de personas que puedan ayudarnos”. Así empieza el mensaje publicado en la red social, y que en apenas unas horas ha conseguido más de 37.000 apoyos. Su objetivo es “difundir la desgracia que vivimos desde hace un año por la muerte de mi hijo”.
Víctor Nuño murió en un accidente laboral, apenas 12 días después de empezar a trabajar en una empresa del metal en Sabadell (Barcelona). Sucedió el 27 de noviembre de 2020, cuando quedó atrapado en una de las máquinas que utilizaba para desempeñar su labor. Su familia quiere destapar las irregularidades que rodearon su muerte.
'No descansaremos'
La muerte de Víctor no ha sido en vano, y su familia ha creado la Asociación Víctor Nuño. Según consta en la página oficial, su intención es "concienciar y formar a todo aquel que empieza en el mundo laboral en materia de Seguridad y Salud". Entre otras cosas, se dedican a difundir el caso de esta joven para que no vuelva a repetirse.
Víctor no recibió ninguna formación en Prevención de Riesgos Laborales, ni sabía cómo manipular la máquina. Murió en una plancha industrial que llevaba diez años en desuso y que aquel día tenía deshabilitados los sistemas de seguridad. A pesar de todo, la empresa solo ha sido condenada por una infracción grave, y no muy grave.
Según la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, solo tendrán que pagar una sanción de 40.000 euros, que quedará reducida casi a la mitad. Eso es lo que denuncia Noelia, la madre de Víctor, a través de este desgarrador mensaje en Twitter: “No descansaremos hasta tener justicia”.
La máquina que le arrebató la vida
Según relata Noelia, el 27 de noviembre de 2020 su hijo Víctor Nuño Salvador murió en un accidente laboral con solo 18 años. “Víctor tan sólo llevaba 12 días en la empresa Ferros Sabadell, ubicada en el polígono industrial Pla de Bruguera de Castellar del Vallés (Barcelona)”, detalla. Fue allí donde sucedió el fatídico accidente.
La madre del fallecido afirma que empezó el trabajo lleno de ilusión. Pero según denuncia, “no recibió en esos días la ropa de seguridad obligatoria, ni ningún tipo de formación en prevención de Riesgos Laborales”. Tampoco le dieron, dice, “indicaciones para manipular la máquina que le arrebató la vida”.
Lamenta que “la planchadora industrial tenía deshabilitados los sistemas de seguridad que podrían haber evitado la muerte de Víctor”. Noelia se apoya en la valoración que en su día realizó Inspección de Trabajo de la Generalitat. Además, la máquina “no contaba con protecciones, ni cable perimetral, ni el pulsador para una parada de emergencia”.
Se quedó enganchado
Según el relato de Noelia, Víctor “se quedó enganchado a los rodillos de la planchadora industrial”. Por ello calificaron la infracción como grave, y no muy grave, lo cual considera “una sanción ridícula y ofensiva”. Esta madre asegura que “después de un año, mi familia y yo seguimos destrozados”.
“Nos han arrebatado a la persona que más quería”, afirma, “saco fuerzas por mi hija de 13 años”. Por todo ello dice que “queremos justicia, mi hijo no es un número sin más, ni ninguna de las personas que mueren por esta causa”. Su lucha persigue que se sepa toda la verdad, y que se repare el daño causado de forma adecuada.
Su petición es clara: “Pido al departamento de Trabajo de la Generalitat, y personalmente a todos los responsables, que nos ayuden a revisar el caso de mi hijo, al que tuvimos que despedir forzosamente cuando apenas empezaba a vivir”. Su mensaje ya cuenta con el apoyo de miles de personas, ahora es el turno de las instituciones.