Sigue siendo uno de los hechos más inexplicables para buena parte de la sociedad. Ver como un grupo de chicos muy jóvenes es capaz de agredir a otro de manera brutal por un motivo más bien de poca importancia: el simple hecho de querer robarle su teléfono móvil.
Esto es que lo pasó hace unos días en el barrio madrileño de Lavapiés, según ha adelantado 'Telemadrid', que destacaba la extrema violencia de unos hechos cometidos por unos autores tan jóvenes. Y es que la paliza que la televisión pública madrileña difundía este viernes estaba protagonizada por tres chicos de 14 y 15 años que no tuvieron ningún remordimiento en agredir a otro chico más pequeño que ellos, pues la víctima apenas contaba con 13 años, y que fueron detenidos
Como decíamos, la agresión tuvo lugar el pasado 4 de diciembre. Concretamente se produjo en la calle de Doctor Piga del distrito Centro de Madrid. La víctima habría sido acorralada por los otros chicos que no le asaltaron por casualidad. Y es que todos se conocían, ya que todos ellos eran alumnos del mismo instituto.
Por si con esto no hubiera suficiente, y como ha pasado en otras agresiones entre menores de edad, los agresores grabaron la brutal paliza en unas imágenes que difundido en exclusiva 'Telemadrid'. La grabación es de una particular dureza, sabiendo las edades de los protagonistas y de que aquellos que la realizaron.
Le asestaron múltiples golpes en cabeza y cuerpo
En ella se puede ver como los tres detenidos obligaron al menor agredido a entrar en un portal de la calle citada. Los cuatro se encuentran dentro del mismo cuando empieza la agresión a ritmo de música rap, que uno de los menores tiene puesta de fondo.
A partir de ahí, uno de ellos le deja claro a su víctima cuál es su objetivo, que les dé su teléfono móvil. Pero prácticamente no le dejan ni que les dé una respuesta. Sin mediar más palabras, este mismo le empieza a dar varios golpes en la cabeza de manera brutal.
El niño de 13 años intenta defenderse, pero no puede hacer nada ante la superioridad física de su agresor. Tras los primeros puñetazos acaba cayendo al suelo. Una vez allí tampoco se libra de seguir siendo golpeado, ahora también con alguna patada, y lo poco que puede hacer es intentar proteger su cabeza con sus brazos.
La agresión continúa mientras el agresor le insiste de manera vehemente que le entregue su móvil. «Dame tu móvil», repite en alguna ocasión. Finalmente, el chico de 13 años acaba accediendo. Se ve como se quita la mochila que llevaba a su espalda, saca el teléfono de su interior y se lo entrega a sus agresores. Pese a ello, esto no evitó que recibiera unos últimos golpes mientras todavía no se había levantado del suelo y mientras su agresor le intimida diciéndole que el móvil es ahora para él.
La grabación serviría para que la Policía Nacional, que fue el cuerpo policial que se hizo cargo de la investigación del caso, pudiera identificar a los agresores y detenerlos. Como comentábamos, eran tres jóvenes de entre 14 y 15 años de española, ecuatoriana y paraguaya y que iban al mismo instituto que el agredido. Se ha descartado que pertenezcan a alguna especie de banda juvenil.
Tras ser detenidos, fueron puestos a disposición de la Fiscalía de Menores a la espera de ser juzgados. Se investiga si se trata de una acción puntual o si nos encontramos en un claro caso de acoso escolar. También se trata de averiguar si ha habido otras posibles víctimas.