El caso del tristemente fallecido Pau Donés, víctima de un cáncer de colon el pasado 9 de junio, ha llamado la atención sobre el aumento de los casos de este tipo de enfermedad entre adultos jóvenes, menores de 50 años. Esto preocupa a los especialistas, ya que el cáncer colorrectal afecta precisamente a personas mayores de esa edad.
Uno de los principales factores de riesgo de padecer un tumor en el colon es la edad, ya que el riesgo aumenta a partir de los 50, momento en el que se comienzan a realizar los programas de detección precoz. Sin embargo, el creciente diagnóstico en adultos jóvenes, menores de 50 e incluso de 30, preocupa cada vez más a los especialistas.
En Estados Unidos ya se están planteando bajar la edad de cribado del cáncer de colon y recto a los 45 años. El porcentaje de casos en menores de 50 años ha pasado del 6% al 10% en poco tiempo, y las estimaciones para 2030 hablan de una cifra mucho mayor.
En España, el cáncer de colon o colorrectal es el tumor más diagnosticado computando ambos sexos, y el segundo desglosando por sexos, por detrás del cáncer de próstata y de mama. Según las previsiones, este año se diagnosticarán más de 44.000 nuevos casos.
Los médicos intentan ahora descubrir el motivo del aumento de casos en gente joven. Según un estudio holandés publicado recientemente, el 20% de los casos son hereditarios, siendo el síndrome de Lynch el factor genético más frecuente. Con una identificación de las familias y su seguimiento es posible el diagnóstico precoz de hasta el 20% de casos en adultos jóvenes.
También existen factores ambientales, como el sedentarismo, el sobrepeso, la obesidad y el consumo de alcohol y de tabaco. Una de las dificultades para detectar el tumor en estos casos es que la población menor de 50 años no está incluida en el programa de cribado.
La detección precoz ha demostrado tener una enorme eficacia a la hora de garantizar la cura del cáncer: el 90% de los tumores en el colon se curan si se detectan en fases iniciales. Por eso es importante que los médicos tengan en mente esta posibilidad a la hora de hacer un diagnóstico de un paciente joven con síntomas compatibles con el cáncer de colon.
Dieta mediterránea
Estos síntomas pueden ser sangrados constantes, persistentes o con alteraciones en el tránsito intestinal, sangre en las heces, cambio en el ritmo intestinal, sensación de evacuación incompleta, dolor abdominal, cansancio o pérdida de peso.
Los factores de riesgo para desarrollar cáncer de colon son la edad y tener antecedentes, pero también hay algunos factores que dependen de nosotros, como el consumo de alcohol y tabaco o llevar una vida sedentaria y con mala alimentación.
Una dieta rica en grasas animales y pobre en fibra puede aumentar el riesgo de cáncer de colon, igual que una vida sedentaria y el consumo de alcohol y tabaco. En cuanto a la alimentación, se recomienda una dieta saludable rica en fibra, frutas, vegetales y controlada en grasas. La dieta mediterránea, por sus características, puede actuar como factor protector para evitar el desarrollo de esta enfermedad.
Con todo, los médicos siguen insistiendo en los dos factores fundamentales para la prevención de este tumor, que son los programas de cribado y el estilo de vida saludable. Mientras, siguen investigando el preocupante aumento de este tipo de tumor entre adultos jóvenes.