Montaje con foto del menor fallecido

Mateo, el niño de un año que ha muerto a manos de su padre sin querer

El padre escuchó los gritos del niño y al bajar de la camioneta observó que estaba tumbado en el suelo mal herido

Terrible noticia la que llega de Carolina del Norte, en Estados Unidos: un niño de un año ha fallecido atropellado por su padre de forma accidental. Mateo se encontraba en la entrada de casa y fue arrollado por su progenitor al arrancar el coche. Nadie había percibido que el menor se había escapado de casa. 

Sus padres pensaban que el niño estaba dentro de la casa, pero en realidad había salido aprovechando un descuido. Estando el bebé en la entrada de la casa, el padre puso en marcha el vehículo y avanzó hasta que escuchó un golpe. Al salir observó a su hijo tumbado en el suelo y herido de gravedad.

Aunque trasladaron al pequeño rápidamente al hospital, no pudo superar la gravedad de las heridas. Mateo presentaba contusiones de consideración y no estuvieron a tiempo de operarlo para salvarle la vida. El caso se encuentra en manos de la policía, aunque no se han presentado cargos contra el padre.

Un caso no tan aislado

La policía ha puesto en marcha una investigación para esclarecer las circunstancias de la muerte del menor. Sin embargo, los agentes al mando trabajan con la principal hipótesis de un desafortunado accidente. Un descuido provocó que el niño estuviera en el lugar equivocado, en el momento equivocado.

Foto del menor fallecido
Mateo Ayala-Martínez, el menor fallecido en el incidente | Cedida

Mientras, los padres de Mateo atraviesan por un difícil momento y están contando con el apoyo de amigos y familiares. La familia del pequeño está recaudando fondos para costear el funeral y ayudar a los padres a superar esta situación. Una prima del pequeño fallecido ha creado una página con la que ya han recaudado 5.000 dólares.

El desafortunado suceso en el que murió Mateo no es tan aislado como parece. Según las directrices de Emergencias, en caso de atropello hay que ponerse en contacto con el 112 y ofrecer una serie de datos. Sobre todo, la localización exacta, el número de heridos, el estado en el que se encuentran y las circunstancias.

Escuchó como el niño gritaba

El accidente mortal se produjo el viernes por la noche en el domicilio familiar de los Ayala Martínez. Una vez en el hospital, los padres dieron los detalles del incidente y los médicos, siguiendo el protocolo, avisaron a la policía. Los agentes encontraron la camioneta con la que el padre había golpeado sin querer a su hijo.

Tras confirmar que el Chevrolet Silverado era el vehículo del atropello, e identificar al padre de Mateo, Edgar, como el conductor, abrieron una investigación. Según las primeras pesquisas, el accidente se produjo cuando el hombre quiso mover el vehículo de lugar. En un momento dado escuchó cómo el niño gritaba.

Foto del lugar de los hechos
El padre atropelló sin querer a su hijo en la entrada de casa | Cedida

La madre estaba dentro de la casa cuando sucedió el accidente. El padre explicó a la policía que ambos creían que el pequeño estaba dentro de la vivienda. Al observar que había atropellado a su hijo lo llevaron rápidamente al centro médico, donde Mateo murió a las 04:24 horas de la madrugada.

Un accidente reciente en España

En España, el caso más reciente es el de una madre que atropelló mortalmente a su hija de cinco años, de forma accidental, en Girona. Sucedió el domingo 26 de septiembre, en el barrio gerundense de Montilivi. La madre estaba aparcando cuando en un momento dado golpeó a su hija por accidente.

Fue la propia mujer quien avisó a la policía, y los agentes se personaron en el lugar para abrir una investigación. Los servicios de emergencia se desplazaron hasta allí pero no pudieron hacer nada para salvar la vida de la niña. La mujer tuvo que ser atendida por los psicólogos de emergencia tras el suceso.

Inicialmente la mujer no fue detenida, aunque podría enfrentarse a un delito de homicidio imprudente. Aunque el delito acarrea altas penas de cárcel y sanción económica, se considera que la muerte de la menor fue un desgraciado accidente. Los agentes hacen un llamamiento a tener siempre ubicados a los menores al maniobrar con el coche.