Conmoción en Estados Unidos después de la muerte de Autumn, una niña de 8 años, a manos de su padre. Los hechos ocurrieron en la ciudad de Elk River, en el estado de Minnesota, el 13 de agosto del 2020. Al parecer, el padre de la menor, Brett Jason Hallow; y su pareja, Sarah Kay Hallow, le dieron una paliza por haberse portado mal.
Según han relatado medios americanos, los hechos no se quedaron solo en la paliza, sino que llegaron a torturar a la niña. En primer lugar, tras "portarse mal", decidieron castigarla sin comer ni beber agua durante días. Durante ese tiempo propinaron varias palizas a la niña, que acabó muriendo por las heridas y los golpes después de una de ellas.
La Policía de Minnesota recibió un aviso el 13 de agosto del 2020 sobre una niña inconsciente en su casa. Cuando llegaron a la vivienda, los agentes se encontraron a la niña tumbada boca abajo en la bañera y con varias heridas en la cabeza.
Intentaron reanimarla hasta que llegaran los servicios médicos, pero tan solo pudieron certificar su muerte. La autopsia realizada a la pequeña reveló que tenía heridas punzantes en su cabeza y varias hemorragias abdominales y cerebrales.
Además, la menor tenía también varias heridas en las caderas y las manos, así como varios moratones por todo el cuerpo. Brett y su pareja fueron detenidos la noche siguiente como principales sospechosos de la muerte de la pequeña. Diez meses después, han confesado en el juicio.
Se enfrentan a 40 años de cárcel
La revista 'People' ha explicado que la pareja castigó a la niña varios días dentro del baño. La tuvieron sin comer ni beber durante todo ese tiempo en el que también le daban varias palizas al día.
El caso ha conmocionado al estado de Minnesota por la brutalidad de la muerte de la niña. Se trata de un flagrante caso de maltrato infantil sobre el que el juez decidirá en las próximas semanas..
Tanto Sarah como Brett se han declarado culpables en el juicio de un delito de asesinato en segundo grado. Los padres también se han declarado culpables de otros casos de malos tratos a otros niños. Se trataría de un hermano de Autumn y de otro niño ajeno a la familia, que ocurrieron en 2019.
Sumando todos los delitos, incluido el asesinato de su hija, Brett y Sarah se enfrentan a condenas de hasta 40 años de cárcel. Será en septiembre cuando se celebre la vista y el juez emita un veredicto.
La madre de la pequeña ya había denunciado malos tratos
La madre de la pequeña, Kelsey Kruse, ya había denunciado ante los Servicios Sociales que su hija podría haber estado sufriendo malos tratos. De hecho, ha denunciado a la administración por no haber defendido a su hija cuando ella presentó las denuncias.
Sobre la condena al padre de su hija y a su pareja, Kelsey cree que no es suficiente. "Siento que declarándose culpables para tener una condena más pequeña es de cobardes", explicó para un medio local. Aun así, admite que tras la confesión podrá descansar más tranquila, sabiendo qué le pasó realmente a su hija.
Aunque no puede recuperar a Autumn, Kelsey ha estado denunciado el caso en los medios de comunicación para evitar que se repita su caso. Expone que ella denunció la situación ante los Servicios Sociales y que ellos no hicieron nada. De hecho, los ha denunciado por eso.
Ahora quiere que su caso no se repita y lucha por proteger a otros menores que puedan encontrarse en situaciones similares. Cree que el sistema "falló" y denuncia que antes de la muerte de Autumn no pudo verla durante seis meses.
Ella y Brett tenían la custodia compartida de la niña al 50%, es decir, 15 días con la madre y otros 15 con el padre. Pero el padre de la niña dejó de entregarle a la niña. Aun así, nadie investigó y Kelsey estuvo meses preguntándose qué pasaba con su hija.