Los expertos están estudiando la evolución del comportamiento del volcán y de sus sustancias. Han alertado que una nueve con gases tóxicos se dirige a la península y podría presentarse en forma de lluvia ácida.
Toda la nación está expectante con el avance y desarrollo de los sucesos de la isla de La Palma, en las Islas Canarias. Desde que entrara en erupción uno de sus volcanes, los ojos están puestos en todos los puntos afectados por la lengua de lava.
Las poblaciones aledañas ya han sido evacuadas por el alto riesgo que supone, ya que se encuentran en la ruta del magma al mar. La devastación que está causando ha dejado a muchas familias sin sus hogares y modos de vida. Más de 6 000 personas han tenido que ser desalojadas, pero por suerte no hay que lamentar ninguna pérdida humana.
Por otro lado, las consecuencias que está teniendo para el entorno están siendo destructivas. Está causando la destrucción de muchos centenares de hectáreas y está expulsando al aire una cantidad de gases que afectan a la salud.
Esta emanación de sustancias nocivas están inundando a toda la isla e incluso ya ha llegado a otros puntos del archipiélago. Los expertos están estudiando la situación y alertando a toda la población para que sigan una serie de recomendaciones de protección.
El avance del vapor volcánico no tiene una ruta fija, por lo que los expertos están estudiando los posibles escenarios. Han avisado que los gases tóxicos podría llegar en las próximas horas a la península.
Las consecuencias del volcán llegan al resto de España en forma de lluvia ácida
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) está estudiando constantemente las condiciones climáticas para tener una visión del avance de las nubes nocivas. Hace unos días aseguraron que era probable que, con la llegada del magma al mar, se produjera la caída de una lluvia ácida.
Sin embargo, las últimas estimaciones apuntan que otros puntos del país también podrían sufrir el mismo fenómeno. Esta ha querido matizar que, en caso de darse, lo hará de una forma muy débil y dispersa, y que no se esperan grandes cantidades.
Según sus últimos estudios, las nubes avanzan directamente hacia la península y llegarán a lo largo de la noche del jueves y el viernes.
La AEMET ha estado haciendo estudios sobre el aire y sus componentes a lo largo de la semana y ha detectado grandes cantidades de dióxido de azufre en otras zonas. Ha asegurado que la cantidad registrada supera en más de 400 veces los valores normales, por lo que el aire está demasiado viciado.
El comportamiento de estos gases es impredecible y ya se encuentra presente en todas las islas y en dirección al continente. También su presencia puede ser detectada en otros puntos geográficos como África o algunos puntos de Europa.
Aun así, los expertos han querido tranquilizar a la población y asegurar que pesar de la alta concentración de este compuesto no es perjudicial. Debido al carácter puntual de la misma no entraña riesgos, ya que no será una exposición prolongada.
Además, la nube en cuestión se encuentra en capas muy elevadas de la atmósfera, por lo que se notará en los puntos más elevados de la geografía española. Sin embargo, la llegada de las lluvias puede favorecer que este material descienda dichas capas y caiga en forma de lluvia ácida.
La situación está generando graves consecuencias en la zona afectada y está repercutiendo en diferentes puntos también. Esperemos que la llegada de esta nube no traiga la presencia de sustancias nocivas para la población.