Imagen de un elefante comiendo de un árbol

Liberan al elefante más triste del mundo que solo se relajaba a ritmo de Frank Sinatra

El animal necesitaba una conexión, ya que nadie se había preocupado por él en muchos años

Al ritmo de 'My Way'  de  Frank Sinatra  y a dieta, el elefante 'Kaavan'  se prepara en un zoológico  de Pakistán  para ser liberado tras una intensa campaña internacional y enviado a un santuario de Camboya, donde esperan que se recupere de una depresión y otros problemas mentales  después de haber pasado décadas encadenado. A sus 37 años, el paquidermo grisáceo será trasladado al CambodiaWildlife Sanctuary a finales de este mes en una compleja operación que implica un vuelo de siete horas desde Islamabad a Phnom Penh y que lleva a cabo la organización por los derechos de los animales Four Paws International.

Todos los animales  del zoológico  capitalino están siendo trasladados a otros lugares gracias a años de campañas de activistas, entre ellos la cantante estadounidense Cher. Esa presión culminó en mayo con la orden del Tribunal Superior de Islamabad de clausurar del zoo  por sus malas condiciones, liberar al elefante  y enviarlo a un refugio. En los últimos años al menos 500 animales  han fallecido en ese zoo  por las malas condiciones y la falta de cuidados médicos.

La liberación del elefante  no es una misión fácil, dado el estado mental  en el que está tras 36 años encerrado en un pequeño recinto, la mayoría de ellos encadenado, y donde se encuentra además en soledad desde la muerte de su compañera Saheli en 2012.
 

Comportamiento extraño

Kaavan  mueve la cabeza y la trompa de lado a lado continuamente, un síntoma de estrés. "Es una perturbación mental  cuando pasas encadenado 30 años", dice a Efe Amir Khalil, el jefe del equipo de Four Paws International que se ocupa del traslado del paquidermo. Cuando Khalil llegó en agosto a Islamabad se encontró a un elefante  agresivo, al que no se podía acercar. Un día, aburrido, comenzó a cantar 'My way'  de Sinatra, algo que parecía relajar al animal.

"Noté que necesitaba una conexión. Nadie se ha preocupado por él en muchos años", afirma el veterinario austriaco de origen egipcio con 27 años de experiencia y que ha evacuado a animales  de zonas en conflicto en Siria, Irak o Gaza. Ahora Khalil le canta todos los días canciones de Sinatra o las pone en el teléfono mientras lo alimenta o le hace moverse para que se ejercite. Otro problema  al que deben enfrentarse es el sobrepeso del paquidermo después de años de ser alimentado a diario con 200 kilos de caña de azúcar, además de otras comidas, por lo que lo han puesto en estricta dieta.

El único elefante de Pakistán fue liberado, obeso y maltratado | AFP

Viaje complicado

Con la agresividad rebajada y tras perder cientos de kilos de peso, el equipo de Four Paws se centra ahora en entrenar al elefante  para que se acostumbre al contenedor en el que viajará en un vuelo privado a Camboya. «Uno de los retos es evitar que el elefante  se mueva dentro del avión, algo que no alegraría al piloto», dice a Efe Ingo Schmidinger, entrenador del paquidermo.

Schmidinger tiene que conseguir que el elefante  entre en el contenedor y después que se deje encadenar las patas, un requerimiento de seguridad durante el vuelo. Para ello necesita que Kaavan  confíe en él. «No tiene que quererme, pero al menos tenemos que llevarnos bien», bromea el alemán especializado en elefantes. Durante el entrenamiento, Schmidinger hace que el animal se meta en el contenedor atrayéndolo con comida y una vez dentro le da más alimentos para que se acostumbre a la estrecha jaula.


Elefante activista

El destino del deprimido Kaavan  lleva años en el aire. En 2016, el Parlamento paquistaní recomendó que el elefante, un regalo oficial del Gobierno de Sri Lanka en 1985, fuese liberado en un santuario dado su mal estado, unas buenas intenciones que quedaron en nada. Pero activistas por los derechos de los animales  lanzaron una campaña en favor de la liberación del paquidermo, entre ellos Cher, cofundadora de la organización Free the Wild, que junto con Four Paws se hace cargo de los 500.000 dólares que cuesta el traslado del elefante.

«Estoy deseando cantarle durante su viaje a Camboya. Tengo dos canciones», tuiteó recientemente la cantante. Dos osos marrones del Himalaya serán también liberados pronto y enviados a un refugio de Jordania, mientras que otros animales  están siendo reubicados en Pakistán. El zoo  de la capital se está vaciando. Khalil se muestra optimista respecto al futuro de Kaavan  en Camboya, donde primero vivirá solo y cuando esté listo se le permitirá unirse a otros elefantes. «Debe retirarse. Si trabajas 30 o 40 años, entonces te retiras», dice el veterinario.