El cuerpo de la Guardia Civil está de luto por la muerte repentina de un miembro del cuerpo. José Vila, de solo 41 años, ha fallecido súbitamente en la Comandancia de la Guardia Civil de Lugo, donde prestaba su servicio. La causa más probable de la muerte es un infarto, pero este extremo aún no se ha confirmado.
José Vila era natural de Meira (Lugo) y formaba parte del grupo de la Benemérita destacado en la capital de Lugo. Estaba paseando junto a la Comandancia cuando de pronto sintió una indisposición y perdió el conocimiento. La ambulancia se desplazó hasta allí para intentar reanimarle, pero todo fue en vano y murió en el mismo lugar.
La noticia de la muerte de Juan Vila ha conmocionado a sus compañeros de la Guardia Civil de Lugo. También a sus vecinos de Meira, lugar donde vivía con su familia y donde hizo grandes amigos. El guardia civil fallecido estaba casado y tenía dos hijos pequeños.
Dejó huella en Meira
José Vila López, de 41 años y residente en la localidad lucense de Meira, era un hombre muy apreciado en su entorno familiar y laboral. Dejó una importante impronta en Meira, donde hoy sigue la tristeza por la trágica noticia. Hoy se ha abierto el velatorio en el tanatorio de Serfuja As Gándaras, y mañana será enterrado.
El guardia civil estaba de baja por enfermedad, aunque se desconoce si tiene que ver con su muerte fulminante. Murió caminando por la calle en la Rúa Galicia, donde se desplomó pasadas las diez de la mañana. Los que presenciaron el momento llamaron a los servicios de emergencia, que llegaron prestos al lugar.
Sin embargo, no pudieron hacer nada por salvar la vida del agente que, según las primeras hipótesis, sufrió un infarto fulminante. En su entorno destacan su gran amabilidad, y que siempre estaba implicado en las actividades del pueblo. Allí hizo muchas y muy buenas amistades, que hoy tratan de asimilar su pérdida.
Jugaba en el equipo de veteranos
El agente José Vila, una persona entrañable y muy sociable, se integró rápidamente a esta localidad lucense de 1.700 habitantes. Los que le conocieron solo tienen palabras de elogio para su persona. Ha dejado un gran vacío en el equipo de fútbol de veteranos Bretaña, donde hacía de delegado y de jugador.
Las muestras de dolor expresadas por sus compañeros en redes sociales son solo una muestra de lo querido que era. En medio de un gran dolor por la inesperada muerte de su amigo, destacan la huella de amistad imborrable que ha dejado tras de sí. En su pueblo y en su entorno más cercano se preparan para despedir al agente.
“Ráfagas al cielo, ha muerto un guardia civil”, es el mensaje con el que Jusapol despide a uno de los suyos. “Tenemos el doloroso deber de informar del fallecimiento del compañero José Vila, destinado en Lugo”, han comunicado por redes sociales. “Jusapol vuelve a estar de luto”, añaden.
Segundo agente fallecido esta semana
José Vila es el segundo agente fallecido en España de forma repentina en pocos días. Hace apenas unos días, la Policía Nacional de Málaga perdía a uno de sus miembros, Miguel Elías Santos Carballo, con tan solo 48 años. En su caso, la causa oficial de la muerte es un trombo pulmonar, después de una fisura en el gemelo.
Miguel Elías, alias ‘Miguelito’, era miembro de la Unidad de Intervención Policial (UIP) de Málaga. Participó como antidisturbios en la operación contra el referéndum de Cataluña en octubre de 2017. También era delegado sindical de Jupol, organización que vela por los derechos y la seguridad de los agentes.
José y Miguel, dos policías fallecidos en pocos días de forma inesperada. Ambos estaban casados y tenían dos hijos. Algo más unía a estos dos agentes que han perdido la vida, la admiración y el cariño de todos sus compañeros que hoy sienten un vacío irremplazable.
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