Mario Alberto, un joven de 29 años, se quitó la vida en el estado mexicano de Coahuila tras conocer que había dado positivo en una prueba rápida de coronavirus. La fatalidad fue tal, que poco después de su muerte, se demostró que la prueba PCR hecha al joven indico que no tenía el coronavirus. El mexicano entró al Hospital General de Zona Número 7 del IMSS en Monclova el pasado sábado 26 de diciembre, ingresando con todos los síntomas característicos del Covid-19.
«Fue un caso fortuito, inesperado», confesó Leopoldo Santillán Arreygue, delegado del Instituto Mexicano del Seguro Social en Coahuila, hablando del joven fallecido que creyendo que estaba infectado de Covid se quitó la vida en uno de los baños del centro hospitalario. Mario Alberto, residente en el municipio de Frontera, ingresó en el hospital con una saturación del 90% y un test rápido de coronavirus que fue positivo, por eso le llevaron de inmediato al área de Covid-19 y le realizaron una prueba PCR.
«No podemos tomar medidas contra el personal porque no fue un homicidio»
El lunes 28 de diciembre, Mario salió de la cama que ocupaba en el hospital y fue hasta el baño de la habitación, donde escasos minutos después, un enfermero fue a buscarlo para ver cómo se encontraba y lo halló colgado de una sábana en la puerta del baño. El joven no se percató de que no estaba infectado tras la resolución del test PCR. Santillán Arreygue lamentó el suceso, ya que nunca se sabrá por qué tomo esa drástica decisión el joven Mario Alberto. Tal vez por angustia o pánico, el mexicano pasó un mal día y acabó con su vida de la forma más terrible posible.
El delegado del Instituto Mexicano del Seguro Social en Coahuila fue muy claro cuando le preguntaron por la forma de actuar de los trabajadores sanitarios que cuidaron al paciente fallecido. «No podemos tomar medidas contra el personal porque no fue un homicidio, fue una situación fortuita, un caso inesperado», señaló a un reportero que le cuestionó si impondrían alguna sanción a quienes no le siguieron correctamente su evolución. «El paciente estaba en posibilidades físicas de desplazarse al baño y de resguardarse por su propio medio no sabemos adentro que puedan hacer», sentenció el delegado.
Mario Alberto se quitó la vida tras creer que estaba contagiado de Covid
A su vez, Santillán Arreygue explicó que el joven Mario Alberto llegó al centro sanitario con una prueba rápida que había dado positivo «pero nosotros siempre confirmamos con el PCR que es la confirmación real y salió negativa».
Hablando sobre la opción de prevenir más situaciones como la sucedida con Mario Alberto, el delegado contó que todos los pacientes que ingresan en el área de Covid-19 reciben todas las atenciones posibles. «Pero el protocolo indica que al salir reciban apoyo sicológico por los estragos de ansiedad que deja la enfermedad. No podemos predecir si ya vienen con la ansiedad y eso es algo que ya se va a atender desde el primer nivel. Depende mucho que el paciente colabore, que exprese su sentir, sabemos que todos sienten angustia porque vas a un hospital donde sabes que todo puede suceder», apuntó.
Para finalizar su declaración, Arreygue señaló que «todo paciente, indistintamente de la causa por la que vaya a un hospital, impone y eso vamos a atacar». La dura enfermedad del coronavirus ha causado un gran estrés entre los profesionales sanitarios desde el comienzo de la pandemia y según el delegado, con el tiempo «se ha ido mejorando y perfeccionando el protocolo de atención», recalcó el titular del IMSS en Coahuila.
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