Lisby en una imagen superpuesta a un coche de policía

Una joven de 18 seduce y asesina al hombre que abusó de ella cuando era una niña

La mujer se tomó la justicia por su mano porque nunca obtuvo una respuesta legal y jurídica cuando fue violada por la víctima

Una chica de 18 años ha matado a un hombre que la violó cuando era pequeña. Lisby, de 18 años, acabó con Adonay, de 50, el pasado 4 de julio en Honduras. Lo hizo en el hotel Motel Palmera, en el centro de la ciudad de Olanchito Yoro.

Según ella explicó luego a las autoridades, lo hizo porque él la violó cuando era pequeña. Además, ese mismo día pretendió hacerle lo mismo, así que le disparó en defensa propia. 

Medios locales informan que fueron los trabajadores del hotel los que alertaron a los servicios de emergencias tras escuchar los disparos. Cuando los agentes llegaron, Lisby les explicó que le había matado porque él la violó de niña. 

Siguió explicando su versión de los hechos y les dijo a los agentes que se reencontró con él al cumplir los 18 años. Lisby lo sedujo y le convenció para que saliera con ella y se vieran en ese motel. De hecho, ambos llegaron juntos al establecimiento, sin que él supiera que viviría allí sus últimas horas.

Según explica, nunca obtuvo justicia por la vía legal, así que se encargó del asunto con sus propias manos. Le disparó tres veces, una de ellas en la frente. Una vez muerto, Lisby arrojó el arma y su ropa junto al cuerpo y se fugó. 

La Dirección Policial de Investigaciones (DPI) se hizo cargo del caso y empezó a buscar a la joven. En apenas unas horas, dieron con ella y la agresora fue detenida por un deilto de homicidio. 

Después de prestar declaración y explicar todas las circunstancias que rodearon al suceso, fue puesta en prisión preventiva. Está acusada, además del homicidio, por tenencia ilegal de un arma de fuego. 

Prisión por acabar con su padrastro, violador y proxeneta

La noticia llega apenas dos semanas después de conocerse la resolución a un caso bastante similar. Valérie Bacot es una mujer francesa que fue condenada a cuatro años de cárcel por haber matado a su violador, que también era su padrastro. 

Los hechos ocurrieron en marzo del año 2016 en Saône-et-Loire, en el centro de Francia. Valérie llevaba años sufriendo numerosos abusos sexuales y psicológicos por parte de Daniel, su padrastro. 

A los 35 años, la mujer acabó con su violador con un tiro en la nuca. Ella enterró el cuerpo con la ayuda de sus propios hijos y luego denunció su desaparición. Un año después, la Policía encontró el cadáver y acabó deteniéndola por su asesinato. 

Valérie estuvo un tiempo en prisión preventiva, pero luego recibió la libertad condicional hasta que se celebrase el juicio. Finalmente, el Tribunal la ha declarado culpable del asesinato y la ha condenado a cuatro años de cárcel. De estos cuatro años, tres no son de obligado cumplimiento, y como ya ha estado un año entre rejas no tendrá que volver. 

La mujer explicó que los malos tratos y los abusos empezaron cuando ella era menor de edad. En 1995, la hermana de Válerie denunció a Daniel y él acabó condenado a cuatro años de cárcel. Cumplió dos años y medios y salió en libertad para volver a su casa. 

Lejos de aprender de sus errores, Daniel siguió abusando de su hijastra siendo ella todavía menor. Fue en esta época cuando la joven se quedó embarazada de su primer hijo, al que le seguirían tres más. 

Daniel Polette acabó casándose con Valérie y la obligó también a prostituirse. La forzó a tener relaciones con otras mujeres mientras él miraba. La mujer aguantó así durante muchos años, pero cuando pensó que su hija estaba en peligro, decidió actuar. 

Su hija tenía 14 años en aquel momento y ella tenía miedo "de que la prostituyera" o abusase de ella. Ante esta situación, Válerie decidió acabar con él para evitar que la adolescente sufriese el mismo destino que ella.