Martes por la tarde, carretera PO-546 entre Marín y Pontevedra. La abuela Josefa, una mujer de 68 años, lleva a su nieta de la mano para llevarla al parque. De pronto ve que un coche que ha perdido el control se dirige a gran velocidad hacia ellas, y le grita a la pequeña de 6 años que corra. El vehículo las acaba arrollando, acabando con la vida de la anciana y mandando a su nieta al hospital.
La niña permanece ingresada en el hospital, pero logró salvar la vida gracias al último acto heroico de su abuela. Mientras, Pontevedra llora la pérdida de Josefa Pazos, una vecina muy querida que ha perdido la vida de una forma trágica. Creen además que su muerte se podría haber evitado y reclaman una vez más la mejora del tramo en el que sucedió el accidental.
El suceso tuvo lugar el martes poco después de las 5 de la tarde, en el barrio de Estribela, en Pontevedra. Josefa Pazos y su nieta de 6 años iban de la mano por la carretera vieja de Martín, a la altura del número 113 de la avenida de Montero Ríos, cuando un coche las atropelló. Según fuentes policiales, el conductor perdió el control del vehículo y atravesó los dos carriles de la vía hasta impactar contra las víctimas.
La causa más probable del accidente es el exceso de velocidad. Tras perder el control golpeó primero contra un vehículo estacionado, y posteriormente invadió la acera contrara llevándose por delante a la anciana y a su nieta. Josefa murió en el acto, pero al parecer la pequeña tuvo tiempo de apartarse y eso le salvó la vida. Aun así, sufrió heridas graves y tuvo que ser trasladada a un hospital con politraumatismo. Por su lado, el conductor del vehículo fue detenido y está acusado de un presunto delito contra la seguridad vial. Se da la circunstancia de que tiene 19 años y hacía solo 7 meses que tenía carnet de conducir.
Desde el pasado 11 de mayo, en España la velocidad en vías urbanas está limitada a 20 km/h en vías con una única plataforma de calzada y acera, a 30 km/h en vías de un único carril por sentido de circulación, y a 50 km/h en vías de dos o más carriles por sentido. En el lugar donde se produjo el accidente se podía ir solo a 30, aunque según los primeros indicios el joven habría superado con crecer ese límite. El detenido quedó en libertad después de prestar declaración, y ahora es investigado por homicidio imprudente.
La última reforma del Código Penal incluye un endurecimiento de las penas por conducción temeraria, y el joven podría ser castigado con una pena máxima de nueve años de cárcel. Mientras se investiga la velocidad a la que iba el Citroen Saxo y las condiciones de la vía, en la parroquia de Estribel despidieron a Josefa entre muestras de gran dolor, y después fue incinerada.
'Dos familias van a sufrir por esto'
En Estribel, el dolor se mezcla con la indignación ya que los vecinos llevan años reclamando mejoras en la vía para aumentar la seguridad. Desde la asociación Estriceres, Rita lago explica que en 2018 se quejaron a la Xunta, al Concello y a Fomento. El tema llegó incluso al parlamento gallego el año pasado, pero no hicieron nada. Ahora, en todo el pueblo hay un clamor: esta tragedia se veía a venir.
«Sabíamos que iba a pasar algo, y ahora hay una señora muerta y una niña que se quedó sin abuela y con un trauma de por vida. Al final son dos familias que, por culpa del pasotismo de las administraciones, van a tener que sufrir las consecuencias», asegura Rita Lago a La Voz de Galicia. La representante vecinal está segura que las rivalidades políticas impedirán que se haga algo, a pesar de la tragedia.
Desde varias asociaciones de vecinos piden un calmado de tráfico y una mejora de la carretera de Estribela. Las aceras están en mal estado y la maleza que crece en los arcenes obliga a los transeúntes a bajar de la acera para poder andar. Además, los pasos de peatones están despintados y raramente se respetan los límites de velocidad.
Una vecina de la casa de enfrente donde sucedió el accidente relata que «escuché el accidente y cuando salí a la puerta de casa la mujer estaba tendida en la acera, mientras atendían a la niña». Los que viven allí esperan que ahora que esta triste tragedia sirva almenos para remover conciencias en la administración, y llevar a cabo por fin la renovación del trazado.