Javier Martínez, el vicepresidente del Sporting, está ingresado «grave» en el Hospital de Cabueñes, en Gijón (Asturias), por una infección de coronavirus.
Los rumores sobre el estado de salud del también hostelero empezaron a circular durante el pasado fin de semana, del 30 y 31 de enero, y se han ido intensificando a lo largo de esta semana, ya que el vicepresidente de OTEA no se ha dejado ver en el ámbito público durante los últimos días.
Según la información que han proporcionado fuentes del entorno empresarial de Javier Martínez a 'El Confidencial', el vicepresidente del Sporting ingresó en el Hospital de Cabueñes el pasado 29 de enero con un cuadro de insuficiencia respiratoria y fiebre. Aunque se encuentra en estado «grave», está respondiendo bien al tratamiento.
«Tenemos las salas cerradas desde el 23 de enero por las restricciones del Principado, así que damos por hecho que el contagio de Javier se ha dado en el ámbito privado», ha señalado el club.
Javier Martínez, posible culpable del brote del Sporting
Martínez es propietario del Grupo Gavia, que cuenta con varios locales de ocio repartidos por Gijón, y ganó fama a principios del 2021, después de que saliera a la luz que varios jugadores del Sporting celebraron la Nochebuena en una de las salas que regenta el vicepresidente de OTEA.
Allí los futbolistas incumplieron los protocolos sanitarios. No mantuvieron la distancia de seguridad ni la obligación de estar en espacios cerrados con mascarilla.
Se les habilitó el salón de bodas de la sala Bellavista para celebrar un almuerzo con mesas de cuatro personas y para una posterior fiesta. Al evento acudieron aproximadamente 80 personas.
Tan solo unos días después de esto, varios jugadores del equipo tuvieron ausentarse tras dar positivo en coronavirus y más de cien personas relacionadas con el Sporting se vieron obligadas a ponerse en cuarentena.
A la espera del peritaje policial
Aunque no se ha podido probar que el brote de los rojiblancos empezara en la fiesta, el escándalo tuvo tanta repercusión que incluso los aficionados del club llegaron a pedir la dimisión de Javier Martínez. Pese a que el hostelero consiguió conservar su cargo de vicepresidente, se mantiene a la espera del peritaje policial.
Delia Losa, la delegada de del Gobierno en Asturias, destacó que «hubo actuaciones susceptibles de sanción» en la fiesta que se celebró en la sala de Bellavista en Nochebuena y puso en manos de las autoridades la investigación, que todavía se encuentra en fase preliminar.
Además del establecimiento donde tuvo lugar el evento, dos jugadores del Sporting y otros diez asistentes han sido propuestos para sanción por saltarse las medidas sanitarias.
A pesar de que las imágenes que se consiguieron recabar de la fiesta muestran que sí que se celebró una fiesta en la que no se cumplieron las medidas de seguridad, Javier Martínez negó que hubiera sido así.
El vicepresidente del Sporting dijo que se había realizado una actividad abierta al público a la que denominó «tardeo» en la que explicó que «se disfruta de los amigos manteniendo las normas vigentes: solo servicio en mesa, con todos sentados, cuatro comensales por cada mesa y manteniendo la distancia de seguridad».
Asimismo, el hostelero aclaró que tan solo acudieron 20 personas pese a que el local tiene capacidad para 200 y dejó claro que aunque sí que hubo personas que «en un momento puntual descuidaron las medidas de seguridad», el personal del establecimiento les llamó la atención «hasta el punto de que a uno de ellos se le instó a abandonar el local».
Pese a las negativas a que se hubiera celebrado una fiesta en una de sus salas, Javier Martínez pidió disculpas y asumió los hechos y las posibles repercusiones que pudiera tener la celebración de Nochebuena.