Iván Martínez Llosa acababa de cumplir 57 años junto a su familia en Carbayín (Asturias). Estaba casado, tenía dos hijas, y llevaba toda la vida al volante de un camión de la empresa familiar. El pasado viernes perdió la vida en un accidente de tráfico en el puerto de Pajares.
La pérdida de Iván ha causado un gran dolor en su entorno, ya que era una persona muy conocida y querida. Su hermano, Eduardo, es el portavoz de Foro en el ayuntamiento de Siero, y fue alcalde de esa localidad. “Estamos destrozados”, comentó en el tanatorio.
“No sabemos qué pudo ocurrir, tenía mucha experiencia con el camión y conocía bien la ruta”, explicó Eduardo. Su hermano había empezado en la empresa junto a su padre, hasta que este se jubiló. Luego había seguido con el negocio con gran pasión y empeño.
“Empezó muy joven, igual con unos veinte años”, cuenta Eduardo, “casi cuatro décadas de Un gral volante de un camión”. Era un experto en la carretera, y además conocía bien el trazado de la carretera donde murió. Por eso definen su muerte como “inexplicable”.
La mañana del accidente, Iván transportaba pacas de hierba por la N-630 a su paso por el pueblo de Pajares sentido Gijón. A las 07:04, por motivos que se desconocen, perdió el control del vehículo y se salió de la vía. Falleció prácticamente en el acto.
Los restos mortales de Iván tuvieron que ser liberados del amasijo de hierros de la cabina. Efectivos de Bomberos estuvieron trabajando en las complicadas tareas de rescate. La cabina del camión había quedado pegada a un muro de la calzada.
Costalero muy querido
Los que conocieron a Iván le describen como alguien respetuoso, bromista y generoso. Ayer pudieron darle el último adiós en la iglesia de San Juan del Coto. Allí estaba su hermano Eduardo, y también su esposa Ana y sus hijas Irene y Elena.
Ofició la ceremonia el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, que recordó el paso de Iván por la Hermandad de Estudiantes de Oviedo. El fallecido era costalero “y últimamente tenía mucha implicación con las actividades que organizábamos”.
La hermandad también se ha acordado de Iván con un doloroso mensaje: “Un terrible accidente de camión nos ha robado para siempre a nuestro hermano. Una muerte inesperada, de sopetón, de la que queremos pensar que es solo una mala pesadilla”.
Iván era uno de los organizadores de la trail de Monsacro, una carrera en la que ponía toda su ilusión. Un compañero suyo de andanzas en la montaña es Isaac Blanco, nacido el mismo año. También tuvo un recuerdo muy emocionado para su amigo muerto.
Su hermano Eduardo, inconsolable
“Era una persona impresionante, un buen amigo, un buen hermano”, afirmó Eduardo en el acto de despedida. Sus seres queridos le describieron con palabras de elogio. Pero sobre todo, destacaron que “es un palo durísimo, lo vamos a echar mucho de menos”.
En la iglesia se vivieron escenas de mucho dolor, sobre todo por parte de los más allegados a Iván. Como su hermano Eduardo, que se mostró inconsolable por la repentina pérdida. “Estamos muy afectados, como no podía ser de otra manera”, comentó.
Viernes negro en las carreteras asturianas
El día que murió Iván fue un viernes negro en las carreteras asturianas. También perdió la vida un joven de 19 años, en Cangas de Narcea. En el mismo accidente una persona de la misma edad resultó herida, y sigue ingresada con pronóstico reservado.
El fallecido iba al volante y tuvo que ser liberado del interior del coche por parte de los Bomberos. El accidente se produjo de madrugada, sobre las 03:08. El coche en el que viajaban los jóvenes cayó por un desnivel de unos 50 metros.