Los miembros de la familia fallecidos en Texas a manos de dos gemelos

Investigan a dos gemelos que pactaron acabar con 4 familiares y luego quitarse la vida

Los vecinos de la familia no entienden qué pudo pasar, pero las autoridades creen que los gemelos sufrían de algún tipo de enfermedad o trastorno mental

Seis miembros de la misma familia acabaron muertos tras un tiroteo que podría haber sido causado por dos de ellos: dos hermanos gemelos. En ese tiroteo, que se produjo en el estado de Texas, en Estados Unidos, murieron el padre, Towhidul, y la madre, Iren, de 56 y 54 años respectivamente; la abuela, Altafun, de 77 años; los dos gemelos, Farhan y Farbin, de 19 años; y el hermano de 21 años, Tanvir. 

Los dos hermanos de 19 años son los principales sospechosos, según las autoridades americanas, que todavía están investigando lo ocurrido para intentar darle explicación a un crimen que ha conmocionado a todo el estado, y más concretamente a la ciudad de Allen, donde vivía esta familia de origen bangladesí.

Según explicó Jon Felty, portavoz de la policía y sargento, al periódico local 'The Dallas Morning News', la principal hipótesis sobre la que trabajan los investigadores es que los dos hermanos gemelos alcanzaron un acuerdo por el que decidieron quitarse la vida, pero a diferencia de otros casos similares, también decidieron llevarse a toda su familia con ellos. Además, la Policía descubrió durante el proceso de investigación que uno de los dos hermanos había comprado un arma por internet. 

La investigación se sustenta hoy por hoy en una carta que encontraron las autoridades en las redes sociales de Farhan, uno de los dos hermanos gemelos. Al parecer, escribió la carta como si estuviera en pasado y la dejó publicada poco antes de cometer los crímenes: «Hola a todos. Me maté a mí mismo y a mi familia», escribió. 

Lejos de arrepentirse o de mostrar algún sentimiento de culpa por lo que iban a hacer, los dos hermanos explicaron en este texto que lo habían tenido muy fácil para comprar el arma por internet, y se jactaron de ello, en un tono que una parte importante de la población ha aprovechado para volver a denunciar el extendido uso de armas en los Estados Unidos. 

Al parecer, según la nota que las autoridades investigan, los dos hermanos podrían haber tenido un historial de enfermedades mentales o algún tipo de trastorno que explicaría, en parte, la motivación del crimen que acabaron cometiendo. Según explican, la familia era consciente e intentaron ayudarles, pero esos problemas se habían agravado recientemente.

Farhan fue expulsado de su Universidad después de explicarle a uno de sus compañeros de habitación que pensaba matar a su familia, así que volvió a casa, donde le esperaba su hermana, que llevaba tiempo «deprimida y con ansiedad social». Debido a estas condiciones, los hermanos decidieron acabar con su sufrimiento y llevarse a su familia con ellos.

Una familia querida en el barrio

Los vecinos de la familia todavía no se explican qué pudo pasar por la mente de estos dos hermanos como para que decidieran acabar con otros cuatro miembros de su familia. Según explican, eran una «familia sencilla y divertida». 

Lo peor de todo es que la abuela, de 77 años, ni siquiera vivía con ellos, sino que había llegado recientemente de Bangladesh para visitarles. De hecho, su vuelo de vuelta estaba previsto para una semana antes del crimen, pero la mala suerte o el destino quiso que las restricciones por el Covid-19 la obligasen a quedarse más tiempo con ellos. 

«La madre siempre hablaba de los niños, de lo buenos que eran en los estudios, de cómo estaban ingresando a buenas escuelas con becas», explica otra vecina que demuestra que los vecinos no entienden qué pudo pasar. 

Sobre la hermana mayor de los gemelos, de 21 años, otro vecino explica que «era muy dulce», y que los autores del crimen eran dos niños «muy inteligentes» a los que les iba muy bien en la escuela y que tenían perspectivas de futuro, lo que vuelve todavía más confuso el motivo del asesinato de toda su familia. 

La familia estaba bien asentada en la ciudad de Allen, donde eran conocidos por sus vecinos, después de llegar a los Estados Unidos hace 15 años. Primero estuvieron viviendo en Nueva York, pero poco después se desplazaron a esta ciudad al norte de Dallas, donde el padre de familia trabajó en tecnología de la información mientras su mujer se hacía cargo de la casa y de los hijos.